Volvo Group Trucks México comandado por su Director General, Matthew Walsh invitó a un numeroso grupo de transportistas a vivir la experiencia Volvo 360 con el objetivo de conocer desde sus entrañas los productos que comercializan en México.

Para confirmar la calidad y alta tecnología en todo el proceso de fabricación, la primera escala fue la planta de ensamble de New River Valley, Virginia. Asimismo, los asistentes fueron testigos de lo que Göran Nyberg, Presidente de Volvo Trucks Norte América Sales & Marketing, compartía apenas hace unas semanas con el anuncio de una inversión de 69 millones de dólares para esta factoría: “La planta de NRV y la pasión de sus empleados son una ventaja competitiva para Volvo”.

Esta planta de ensamble de Volvo Trucks cuenta con una superficie de 149,000 metros cuadrados lo que la convierte en la factoría más grande de la marca en el mundo. Desde ahí abastecen la demanda de tractocamiones de México, Estados Unidos y Canadá.

Alta tecnología se distingue de inmediato a través de los 71 robots que se utilizan para la construcción de las cabinas y 16 para la aplicación de pintura en las mismas. Estos brazos automatizados y los más de 2,550 colaboradores hacen posible una producción diaria de 148 unidades.

Como parte de la experiencia Volvo 360 los asistentes tuvieron la oportunidad de tomar el volante de varios tractocamiones equipados con la transmisión manual automatizada I-Shift dentro del óvalo de «Motor Mile Speedway» en Dublin, Virginia.  Al descender de las unidades la mayoría de los asistentes que actualmente no cuentan con esta tecnología en sus vehículos, señalaron su interés en probarla dentro de sus flotas debido a su facilidad de conducción, comodidad y eficiencia.

La tercera escala en esta gran experiencia preparada por la firma sueca fue la planta de fabricación de motores y transmisiones en Hagerstown, Maryland. Es aquí donde se manufactura el motor, mayor a 10 litros, más vendido alrededor del mundo: el Volvo D13. Asimismo, se produce la transmisión I-Shift que al día de hoy ya se incorpora en ocho de cada 10 tractocamiones Volvo.

La gran eficiencia con la que opera esta factoría permitió que durante 2013 se produjeran 42,125 motores y 23,878 transmisiones. Esta planta parece más un gran laboratorio de fabricación con alta tecnología y automatización en el cual cientos de robots van trasladando los motores entre diferentes celdas de manufactura, mientras que los técnicos y brazos automatizados con todo cuidado y precisión incorporan componentes o llevan a cabo procesos de verificación para asegurar la calidad de todo lo producido.

La experiencia Volvo 360 cerró con broche de oro con la visita a las oficinas de la firma sueca en Washington D.C. a través de la cual se coordinan los diferentes acercamientos entre directivos de Volvo con las autoridades del gobierno norteamericano con el objetivo de tratar los temas esenciales del autotransporte.

Durante la cena final Göran Nyberg, señaló: «Para nosotros es muy importante que conozcan lo que está debajo de nuestra piel (plantas en New River Valley y Hagerstown), nuestra gente y nuestros productos, su calidad y el valor que queremos entregarles». Asimismo, puntualizó: «Estamos haciendo inversiones importantes para seguir atendiendo al transportista mexicano, es uno de los mercados en donde mayor oportunidad de crecimiento vemos”.

Por su parte, Matthew Walsh reiteró su compromiso de servicio y soporte: «Deseamos construir relaciones de largo plazo con ustedes, una cara en Volvo siempre estará disponible para atender sus necesidades y brindarles el soporte requerido».