En una Asamblea Informativa para cerca de tres mil de sus compañeros, celebrada en el circuito del Zócalo de la capital del país, los dirigentes transportistas atribuyeron el mal estado del transporte público concesionado y el servicio, al rezago histórico en el precio del servicio, propiciado por las autoridades del Distrito Federal desde la época en que gobernó el PRI y actualmente con el PRD, quienes los han sometido a tarifas electoreras, que han provocado una baja calidad en el transporte.

Con la consigna “¡Por un transporte digno, una tarifa justa!” expresada por su vocero Nicolás Vázquez, expresaron que fueron ellos quienes iniciaron el cambio en el transporte durante la administración pasada y llegaron a más de 6 mil 500 unidades renovadas, la mayoría sin ayuda gubernamental.

Asimismo recordaron que la capital del país tiene una tarifa de 3 pesos mientras el promedio en capitales de los estados es de 6.50 pesos, es decir, tienen un déficit de 118 por ciento.

En el caso del Metrobús también están por debajo de los demás sistemas similares en América Latina en un 161 por ciento, ya que el promedio es de 13.09 pesos.

En cambio, dijeron, la Red de Transportes de Pasajeros opera con un costo de 7.56 pesos por cada pasajero que transporta. “Le decimos al gobierno que si a él le cuesta 7.56 pesos mover a cada pasajero y sólo mueve al 3 por ciento, a nosotros que movemos al 51.20 por ciento nos dé una tarifa mínima general de dos pesos para llegar a cinco la mínima y así poder mejorar la movilidad de la ciudad”.

Los transportistas reiteraron en su demanda para tener certeza jurídica, certeza operativa, apalancamiento financiero y una tarifa técnica. “Esta tarifa debe ser definida o normada desde la Asamblea Legislativa, estableciendo que su incremento debe ser igual a la inflación anualizada del año inmediato anterior, con el fin de que no se convierta en una tarifa electorera y provoque lo que hasta hoy, beneficios político-electorales para un grupo o partido en el poder y perjuicios para la ciudadanía, la ciudad y los trabajadores del transporte”, agregó Vázquez.

Alertaron sobre la posibilidad de que el Gobierno del Distrito Federal los quiere colocar en una situación de riesgo para vender los principales corredores a las empresas monopólicas del transporte a nivel nacional y, entonces sí, a ellos darles el incremento que tanto han deseado.