La Comisión Nacional de Seguridad, a través de la Policía Federal, reforzó la vigilancia en la autopista México-Puebla para proteger a los usuarios de las unidades de transporte público.

Personal de las Divisiones de Seguridad Regional y Gendarmería establecieron un esquema de puntos de revisión aleatorios a lo largo de esta vialidad federal, principalmente en los tramos que corresponden a municipios como Ixtapaluca y Chalco, en el Estado de México.

Los elementos de seguridad detendrán, de forma itinerante y en diferentes horarios, a autobuses, microbuses y camionetas del servicio público para efectuar una inspección a los usuarios, con el fin de detectar a personas que porten armas o sustancias ilegales.

El operativo se desarrollará bajo un estricto respeto a los derechos humanos, aseguran las autoridades.

De acuerdo con información oficial, en el último año se desarticularon dos grupos delictivos dedicados al asalto a usuarios de los medios de transporte en esta vía.