Con un nuevo equipo directivo, comandado por Benoit Henry, Continental Tire de México se reporta lista para comercializar 300,000 llantas durante 2016, meta que si bien luce complicada por la fuerte competencia que priva en el mercado, es alcanzable gracias al crecimiento que éste ha experimentado, el cual se incrementó 13% durante 2015, tendencia que de acuerdo con Javier Mendoza,Gerente Nacional de Ventas de la División de Llantas Comerciales, continuará a lo largo de este 2016.
Benoit Henry se dijo gratamente sorprendido por el desarrollo y potencial del mercado mexicano, el cual dista mucho de la idea que tenía en un inicio tras su experiencia en otros países latinoamericanos. Expresó que a su llegada se encontró con un equipo de trabajo muy talentoso y comprometido con dar solución a los requerimientos de sus clientes, por lo que juntos trabajarán por el que desde su perspectiva es el principal objetivo de Continental: “Ser los mejores especialistas en llantas y que los clientes tengan la certeza de poder contar con la marca para solucionar cualquier problema que presenten sus neumáticos”.
El directivo añadió que México es un mercado de gran relevancia para Continental, pues cuenta con un equipo de trabajo de 20,000 colaboradores, superado en número únicamente por Alemania. Por ello, señaló que inversiones como la realizada para la puesta en marcha de Best Drive en Texcoco y la próxima en Monterrey, seguirán siendo fundamentales para incrementar su participación de mercado en tierras mexicanas.
Tras poco más de 12 meses de hacer frente a la problemática ocasionada por la caída del peso frente al dólar, Continental hará un ajuste en sus precios para hacer frente a la devaluación que ha alcanzado niveles del 20 por cierto. Javier Mendoza explicó que aunque la compañía ha estado absorbiendo este incremento, los precios aumentarán solo entre 4 y 5% en nuestro país a partir de marzo, valor prácticamente semejante a la inflación reportada durante 2015.
Al respecto, Benoit Henry señaló que se trata de un incremento bastante moderado, gracias a que el precio del petróleo −materia prima de las llantas− ha disminuido, lo que de alguna manera permite compensar el impacto por el tipo de cambio.
