En el Valle de México y el de Toluca, el Estado de México contará con sensores remotos para identificar y detener vehículos contaminantes en circulación, lo que la convierte en la primera entidad en contar con estos dispositivos de última generación.

Son dos sensores que contaron con una inversión de 11 millones de pesos, informó el Gobierno estatal a través de su Secretaría de Medio Ambiente (SEDEMA).

Asimismo, se dio a conocer que actualmente se encuentra en fase final de pruebas y e instrumentación del protocolo para los operativos; una vez que entren en operación dichos dispositivos, tendrán capacidad de monitorear alrededor de 5,000 vehículos  diariamente y se calcula que, en coordinación con la Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana, podrán detener y sancionar hasta 1,000 al mes.

Cabe destacar que, de acuerdo con los artículos 90 fracción XV y 118 fracción VII del Reglamento de Tránsito del Estado de México, las sanciones por conducir un vehículo que ostensiblemente contaminante, asciende a 1,600 pesos, además de que se procederá a la retención del vehículo.

Raúl Vargas Herrera, titular de la SEDEMA, señaló que en la presente administración aumentaron el número de verificaciones,  al pasar de cuatro millones en 2011 a seis millones en 2016; también incrementaron  los verificentros, al pasar de 97 a 122.

De igual manera, la dependencia resaltó que de 2011 a la fecha, entre la Procuraduría de Protección al Ambiente de la entidad (PROPAEM) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) han sancionado a 104 verificentros con multas que ascienden a los 16.7 millones de pesos, además de que se han cerrado 1,748 líneas de verificación por irregularidades a través del Centro de Monitoreo de la Dirección General de Prevención y Control de la Contaminación Atmosférica de la Secretaría del Medio Ambiente.