El Secretario de Comercio de EU, Wilbur Ross, anunció la imposición de aranceles de 25% al acero y 10% al aluminio importado de la Unión Europea, Canadá y México a partir de la medianoche de este viernes.

En respuesta, el Gobierno mexicano señaló que reitera su postura en contra de medidas proteccionistas que afectan y distorsionan el comercio internacional de mercancías.  

“Se trata de insumos que contribuyen a la competitividad de varios sectores estratégicos y altamente integrados en América del Norte, como el automotriz, aeroespacial, eléctrico y electrónico, entre otros. México es el principal comprador de aluminio y el segundo de acero de Estados Unidos”, indicó en un comunicado la Secretaría de Economía, que encabeza Ildefonso Guajardo.

Ante los aranceles impuestos, la dependencia anunció que levantará medidas equivalentes a diversos productos como aceros planos (lamina caliente y fría, incluidos recubiertos y tubos diversos), lámparas, piernas y paletas de puerco, embutidos y preparaciones alimenticias, manzanas, uvas, arándanos, diversos quesos, entre otros, por un monto equiparable al nivel de la afectación, vigentes hasta en tanto el Gobierno estadounidense no modifique su postura.

“México reitera su apertura al diálogo constructivo con EU, su apoyo al sistema comercial internacional y su rechazo a las medidas proteccionistas unilaterales”, agregó.

Por su lado, el Presidente Enrique Peña Nieto conversó con su homólogo canadiense, Justin Trudeau, sobre las medidas compensatorias que México pondrá en marcha de manera inmediata. El Primer Ministro confirmó que su gobierno igualmente establecerá medidas compensatorias proporcionales.

Ambos titulares reiteraron su compromiso de continuar en estrecha comunicación para defender un comercio internacional libre y basado en reglas, incluida la modernización del TLCAN.

La respuesta del Gobierno mexicano recibió el respaldo de las cámaras industriales. La CONCAMIN señaló que ante la ausencia de una justificación económica y la falta de sensibilidad política en EU para mantener negociaciones en un marco propositivo, es justificable que México actúe en reciprocidad imponiendo medidas similares.

El organismo propuso que se acelere una política industrial que fortalezca el consumo de lo hecho en México, en términos de infraestructura, manufacturas y energía, que permita salvaguardar empleos y empresas del país con el objetivo de elevar el contenido nacional de exportaciones e impulsar la integración productiva y competitiva hacia el interior de México.