En menos de dos meses de operativos dirigidos al reordenamiento al transporte público de pasajeros en la Ciudad de México, el Instituto de Verificación Administrativa (INVEA) informó que ha sancionado a 1,054 unidades lo que representa un monto de cerca de 200 millones de pesos.

La mayoría de las infracciones, se aplicaron por qué las unidades circulaban sin documentos, carecían de alguno de ellos o bien presentaban fallas físico-mecánicas evidentes.

Estas acciones van encaminadas a que los dueños u operadores de ese tipo de vehículos cumplan con los ordenamientos legales y ofrezcan un servicio seguro a los usuarios que diariamente los utilizan como medio de transporte.

Las cifras de esos operativos que son coordinados por el Secretario de Movilidad, Héctor Serrano y con la colaboración de la Secretaría de Seguridad Pública se realizan de forma aleatoria en diversas calles y avenidas, incluso a vehículos del Estado de México que ingresan a la capital del país para ofrecer sus servicios.

Del total de sancionados en este periodo, 538 corresponden a suspensiones de actividades, estas se aplican a los automotores que no están en condiciones óptimas para dar el servicio de transporte público de pasajeros; es decir aquellos que tienen llantas lisas, vidrios rotos o daños evidentes en la carrocería.

A los conductores se les otorga un plazo de 30 días para reparar la unidad, sin que se les aplique algún tipo de multa: 351 de los vehículos corresponden al transporte individual (taxis), 187 más son colectivos.

En tanto que 355 corresponden a remisiones al corralón por carecer de algún documento para circular (placas, tarjeta de circulación, tarjetón o licencia); 185 taxis, 144 colectivos y 26 de servicio privado con aplicaciones móviles.

El resto de vehículos; 161 fueron aquellos que circulaban sin concesión (piratas); 77 de ellos son de servicio individual, 58 colectivos y 26 de servicio ejecutivo.

Cabe resaltar que los operativos que realizan de forma coordinada las autoridades del Invea, Semovi y Seguridad Pública responden a solicitudes ciudadanas de distintas zonas de la Ciudad de México y tienen la finalidad de regular y reordenar al transporte público.

El personal de las diversas dependencias instala los puntos de revisión en los que revisa la documentación de los operadores y de las unidades; además de verificar que estén en condiciones aceptables para proporcionar el servicio.