En el marco del North American International Auto Show (NAIAS), realizado en Detroit, la división norteamericana del fabricante de neumáticos expuso los impactos de seguridad, financieros y ambientales de la eliminación prematura de llantas gastadas.

Así, en este espacio describió que las capacidades de frenado y otras acciones de un neumático pueden cambiar significativamente a medida que se desgasta. Actualmente, el estándar de la industria es probar las cualidades de las llantas nuevas; sin embargo, sus atributos cambian con el tiempo a medida que se utilizan, lo que significa que los consumidores toman decisiones de compra basadas en factores que se vuelven cada vez menos relevantes cuanto más conducen.

Aunque la seguridad puede ser subjetiva de un conductor a otro, señala Michelin en un comunicado, en la industria automotriz y llantera ésta se define típicamente con la distancia de frenado, y especialmente en superficies mojadas. Los resultados de las pruebas aplicadas por este fabricante muestran que las prestaciones de frenado entre las llantas nuevas no son iguales, pero son aún más desiguales en las gastadas.

Cabe mencionar que Michelin realizó experimentos que comparaban las distancias de frenado entre neumáticos específicos en condiciones nuevas y desgastadas para revelar cómo el rendimiento de seguridad cambia con el tiempo. Los «desgastados» se pulieron para colocarlos cerca del final de su vida útil. En los resultados, algunas ruedas desgastadas proporcionan distancias de frenado en húmedo que son aproximadamente iguales o mejores que otras llantas nuevas.

«Esta es una nueva visión para todos en nuestra industria, algo que Michelin cree que todos debemos comenzar a pensar», expresó Scott Clark, quien recientemente fue nombrado director y presidente de Michelin North America, al presentar la iniciativa global de la compañía para crear conciencia entre los consumidores sobre el rendimiento de los ruedas gastadas.

«A lo que nos referimos como ‘rendimiento duradero’ es un problema que involucra la seguridad y el impacto ambiental. Michelin es una compañía que piensa a largo plazo sobre la movilidad sostenible, y estamos comenzando una discusión sobre los estándares de rendimiento para los neumáticos gastados».

Fabricar llantas que ofrecen un buen rendimiento a lo largo del tiempo también tiene importantes beneficios ambientales y financieros, considera la compañía. La eliminación prematura de neumáticos cuesta a los conductores de automóviles más de 25,000 millones en todo el mundo, lo que representa un mayor consumo de combustible y compras innecesarias de llantas, según una investigación independiente de la consultora Ernst & Young.

En la remoción anticipada también desperdician aproximadamente 400 millones de neumáticos al año a nivel mundial, un impacto masivo en vertederos y otras redes de eliminación al final de la vida útil.