El sector empresarial mexicano constituyó una mesa de coordinación a fin de canalizar herramientas, víveres y alimentos para hacerlos llegar a las zonas más afectadas tras el sismo de 7.1 grados que golpeó con mayor fuerza la Ciudad de México, Puebla, Morelos, Edomex y Guerrero.

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) ha establecido canales de comunicación con Secretaría de la Defensa, Marina, Gobernación e instituciones sin fines de lucro como la Cruz Roja para detectar necesidades urgentes. Además, creó una red con organismos y cámaras empresariales, así como una de apoyos regionales en las entidades más afectadas.

De acuerdo con un comunicado del CCE, ya se han canalizado maquinaria para el rescate de personas, alimentos y bebidas; insumos desechables, baños portátiles, textiles, vacunas, materiales de curación, equipo médico y medicamentos de primera necesidad.

La Fundación del Empresariado Mexicano (Fundemex) puso a disposición cuentas bancarias para canalizar recursos a las víctimas de este movimiento telúrico registrado el 19 de septiembre. Los donativos serán deducibles de impuestos.

Adicionalmente, el sector privado mexicano, a través del CCE, constituirá un fideicomiso, denominado Fuerza México, para canalizar las aportaciones de la iniciativa privada -desde el interior y exterior del país- para la reconstrucción de zonas afectadas.