Para la segunda mitad del 2014, Volvo Buses, comandado por Rafael Kisel, tiene la meta de obtener 25% de participación de mercado en el segmento de foráneos, mientras que en urbanos, confían en que para el próximo año se reactive la implementación de los corredores que se aplazaron este año,  cuya puesta en marcha podría reactivar la venta de biarticulados para la marca sueca.

Como muestra de la recuperación para el segundo semestre, el directivo adelantó que a finales de año harán entrega de 10 autobuses Double Decker y en el segmento de urbanos, resaltó la entrega de 15 unidades biarticuladas adquiridas por: Corredor Insurgentes (CISA) y RECSA.

Para hacer frente a la competencia y quitar el freno de los primeros meses del año, Volvo tiene claro que la cercanía con sus clientes a través de la ampliación de su red de servicio es primordial, al igual que el apoyo de su brazo financiero Volvo Financial Services, el cual ofrece paquetes muy competitivos para la compra de nuevas unidades.

Kisel destacó también la importancia de dar certeza a sus clientes a través de la atención postventa, garantizada a través de contratos de mantenimiento, los cuales actualmente ya avalan a 1,000 autobuses Volvo.