Este 2019, la producción de diesel de Ultra Bajo Azufre (UBA) se incrementó 90.56 por ciento, al pasar de 50.01 miles de barriles diarios (Mbd) en enero a 95.30 Mbd en junio, según revelan las cifras más actualizadas del Sistema de Información Energética de la SENER.

Este importante aumento significa una respuesta a las demandas de la industria armadora de vehículos pesados y los transportistas, quienes piden certidumbre respecto a la disponibilidad de este combustible de cara a la última transición de estándares de motores estipulada en la NOM-044 de la SEMARNAT.

Además del continuo crecimiento en la producción de diesel limpio, los datos de la Secretaría de Energía indican que, en contraste, la refinación de diesel de más de 15 partes por millón (ppm) –denominado en esta estadística como Pemex Diesel– ha ido a la baja.

La producción de dicho combustible cayó este año un 10.47% al pasar de 59.12 miles de barriles diarios –siendo superior al de DUBA al arranque del año– a 52.93 Mbd al cierre de junio.

Por otro lado, los datos señalan que la Refinería de Cadereyta es la que ha dominado en la producción de diesel limpio, además de ser una de las que menos refina del de más de 15 ppm.

Al nivel de esta sede de Pemex, le siguen las instalaciones de Minatitlán, Salamanca y Salina Cruz; mientras que Madero y Tula no producen este tipo de combustible.

Cabe mencionar que durante el año pasado, Pemex concentró su producción de diesel en el de más de 15 ppm. No obstante, tan solo para mayo de este año, ésta se redujo en 39.39% al pasar de 87.33 miles de barriles diarios durante el sexto mes de 2018, a 52.93 en el mismo periodo de 2019.

En contraste, el comparativo interanual de DUBA señala que la producción creció 107.5% en junio de este año respecto a la de 2018, al pasar de 45.91 Mbd a 95.30.

La pieza que falta en este rompecabezas de disponibilidad, es el combustible importado. En este sentido, el Sistema de Información Arancelaria Vía Internet (SIAVI) de la Secretaría de Economía, revela que al arranque de 2019 se traían al país 297.06 miles de barriles diarios y para mayo pasaron a 328.59.

Aunque la tendencia ha ido a la baja, el incremento de la producción ha subsanado este hecho.

Así, por ejemplo, en enero –incluyendo la importación y producción de diesel UBA– se contaron con 347.07 miles de barriles, de ellos, solo el 14.40% era producto nacional; en comparación, para mayo, ya representaba el 23.32% de los 428.52 Mbd.

Cabe mencionar que esto va en línea con la estrategia de la presente administración federal de rehabilitar las refinerías del país para reducir la brecha entre el producto importado y el hecho en México. Al inicio del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, se dio a conocer que el 80% del combustible en el país provenía del extranjero.

Finalmente, hay que destacar que según el SIAVI no hay exportación de diesel UBA, por lo tanto, se concluye que durante los primeros cinco meses de 2019, la disponibilidad de DUBA ha rondado entre los 350 a 328 Mbd.

A pesar del crecimiento en la producción nacional de diesel UBA, sigue existiendo una importante cantidad del de más de 15 ppm. Aunado a ello, la disponibilidad de DUBA debe ser garantizada en todo el territorio nacional, lo anterior también permite eliminar la posibilidad de que, durante su distribución, se mezcle con el combustible sucio.