Con el objetivo de reducir la cantidad de accidentes registrados en el tramo conocido como “Los Chorros”, en la carretera 57, el gobierno de Coahuila en colaboración con los delegados de Caminos y Puentes Federales (CAPUFE), la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y la Policía Federal se reunieron para establecer una serie de medidas que obliguen a los operadores a respetar los límites de velocidad.

En los últimos 17 meses se han registrado 91 accidentes en esta zona, 88 de ellos ocasionados por exceder los límites de velocidad y de estos 84 fueron responsabilidad de vehículos del servicio público, informó Tito García Herbert, Delegado Regional de CAPUFE.

“El cien por ciento de los accidentes donde fueron responsables vehículos de carga ocurrieron por alta velocidad, siendo ésta, la principal causa de siniestralidad”, precisó.

Los involucrados en la reunión reconocieron la problemática que genera la inclinación de la vía, “se desarrolla una pendiente de 5 kilómetros para descender cerca de 300 metros desde el puerto de San Antonio a la entrada del túnel existente”, expresó Jesús María Montemayor Garza, Director General de la SCT. “Tenemos que pedir a los automovilistas y operadores del camión que sean respetuosos de la velocidad, el límite es de 70 kilómetros”, afirmó.

La SCT, dijo, toma medidas preventivas desde cinco puntos principales, entre ellos, la señalización, por lo cual, a partir de este 12 de octubre se instalará un operativo en este punto, donde participarán las Secretarías Federales, de la mano con Gobierno del Estado.

En tanto, César García Nuño, Titular de la Coordinación Estatal de la Policía Federal, expresó que la dependencia tiene un operativo vigente; sin embargo, reforzará la vigilancia y trabajará con la SCT para hacer un llamado a los conductores. “Hay que recordar que la velocidad te lleva a una falla de frenos debido al declive de esta carretera”, comentó.

Por su parte, el gobierno de la entidad se dará a la tarea de involucrar a diversos organismos, entre los que destaca la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR) para que comprendan la gravedad de la situación, además de actualizar información sobre temas de seguros y condiciones físico-mecánicas de las unidades.