De última hora, el país de la hoja de maple se subió al barco que habrá de zarpar para llevar a la economía norteamericana a mejor puerto. La modernización del acuerdo comercial entre Canadá, Estados Unidos y México supone un mejor escenario para aprovechar las oportunidades de la economía del siglo XXI.

Ildefonso Guajardo, titular de Economía, señaló que esta nueva versión del Tratado es resultado de la voluntad política, la visión y la flexibilidad que mostraron los equipos negociadores de los tres países para lograr los balances necesarios y mantener el carácter trilateral del mismo.

En este sentido fueron publicados cuatro documentos que estructuran los resultados del acuerdo y se enlistan 32 capítulos que desmenuzan los resultados del acuerdo.

Además, los documentos publicados por Estado Unidos y Canadá sí establecen que el nuevo nombre de lo que antes fuera el TLCAN ahora será AEUMC (Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá o USMCA por sus siglas en inglés).

Es importante aclarar que los textos publicados tienen fines informativos y pueden sufrir modificaciones adicionales, pues están sujetos a revisión legal y se entienden sin perjuicio del resultado final del acuerdo entre lo tres países.

 

  1. Fortalecer la competitividad de América del Norte

 

El acuerdo incorpora nuevas disposiciones que fortalecen la plataforma industrial de América del Norte y garantizan que el comercio entre los tres países sea más sencillo y predecible.

 

Sobre las regla de origen…

 

Con esto se afianzan las cadenas de valor regionales y aumentan los incentivos para el desarrollo de proveedores locales.

  • Vehículos ligeros y camionetas: 75% de su valor deberá provenir de procesos e insumos realizados en la región (Valor de Contenido Regional) y 40% de zonas de alto nivel salarial de América del Norte.
  • Vehículos pesados: 70% de su valor deberá provenir de procesos e insumos realizados en la región y 40% de zonas de alto nivel salarial de América del Norte.
  • Autopartes: entre el 65% y el 75% de su valor, dependiendo del tipo de autoparte, deberá provenir de procesos e insumos realizados en la región.

También se crea un Comité de Competitividad para desarrollar la cooperación en materia económica y emitir recomendaciones sobre cómo mejorar la competitividad y apoyar la participación de las pyme en el comercio.

 

  1. Mantener la certidumbre del comercio y las inversiones

 

Es importante destacar que se mantiene el acceso preferente e ilimitado para los productos mexicanos en los mercados de Estados Unidos y Canadá, eliminando la posibilidad de imponerles restricciones que obstaculicen el funcionamiento de las cadenas regionales de valor.

“Se eliminó la propuesta de Estados Unidos sobre estacionalidad, diseñada para bloquear las exportaciones agropecuarias mexicanas en temporada de productos frescos”.

 

  1. Aprovechar las oportunidades de la economía del siglo XXI

 

En este renglón, el acuerdo incorpora herramientas para incentivar el desarrollo y el uso eficiente de los recursos energéticos, promover el desarrollo del comercio digital, facilitar el comercio de servicios financieros, fomentar la competitividad de las telecomunicaciones, y fortalecer la protección de la propiedad intelectual.

Aquí resalta la facilitación del tránsito de personas de los tres países con planes de hacer negocios: “se mantienen las preferencias del acuerdo previo, para facilitar la entrada temporal de visitantes de negocios, comerciantes, inversionistas o profesionales, así como para transferir al personal de empresas con presencia en América del Norte”.

 

  1. Avanzar hacia un comercio regional inclusivo y responsable

 

Impregnado principalmente por el impulso a las pequeñas y mediana empresa , con mayor responsabilidad ambiental y en condiciones laborales dignas, este apartado también garantiza que las empresas propiedad del Estado de los sectores energético y financiero de México continuarán llevando a cabo actividades estratégicas para el país.

Y sobre los 32 capítulos que componen este acuerdo, el número uno busca reducir los costos derivados de operaciones aduaneras, a fin de facilitar los intercambios comerciales, a través de una rápida circulación de mercancías en las fronteras y facilitando el control de la cadena logística.

Mientras que en el capítulo 8, sobre el “Comercio Transfronterizo de Servicios”, se establece que los proveedores de servicios de las Partes no serán tratados de manera discriminatoria y que, en consecuencia, existirá un marco de competencia efectiva en el sector.