ADO Avanza, empresa filial de Grupo ADO, firmó un contrato para gestionar el Metro y Autobús Urbano de Lisboa durante los próximos ocho años, que representa una de las subconcesiones más grandes de Portugal y uno de los mayores contratos de transporte urbano en toda la Unión Europea.

El contrato fue firmado por Sergio Silva Monteiro, Secretario de Estado de Infraestructura, Transportes y Comunicaciones, e Isabel Castelo Branco, Secretaria de Estado del Tesoro, y por Luis Fernando Lozano y Valentín Alonso, presidente y director general de ADO Avanza, y con la presencia de la Ministra de Estado y de Finanzas y el Ministro de Economía de Portugal.

Con este acuerdo, ADO Avanza se hace con la gestión de las empresas públicas CARRIS y METRO LISBOA y se posiciona como uno de los mayores operadores de transporte urbano de pasajeros de Europa.

CARRIS cuenta con una flota de 622 autobuses, que dan servicio a más de 153 millones de pasajeros anuales. La red de autobuses está formada por 70 líneas que recorren la ciudad, sumando más de 30 millones de kilómetros anuales.

Por su parte, METRO LISBOA presta servicio a 150 millones de pasajeros al año con 111 unidades triples de Metro repartidas en cuatro líneas y 55 estaciones. Recorren en total 25 millones de kilómetros anuales.

La gestión de ambos contratos va a representar un crecimiento considerable en cuanto a facturación, actividad y plantilla. En total, ADO Avanza prestará servicio a más de 550 millones de viajeros en la península Ibérica.

“Para ADO Avanza la firma de este contrato supone el cumplimiento de uno de los principales objetivos que Grupo ADO se había planteado en su proyecto de Internacionalización. Uno de los principales objetivos en la gestión del Metro de Lisboa y de CARRIS será mejorar la calidad y fiabilidad del servicio, aprovechando la amplia experiencia del Grupo en movilidad urbana, así como posicionar a Lisboa como el referente europeo en transporte”, señaló el presidente de ADO Avanza.

Cabe destacar que la filial de ADO consiguió este acuerdo por el que compitieron el Grupo Británico National Express, propietario de ALSA; lrta compañía de transportes TCC, participada por la empresa pública TMB, Grupo Moventia, y las Francesas RATP y Transdev.