Pese a las expectativas positivas para la industria automotriz mexicana, los expertos señalan que los beneficios del Tratado de Asociación Transpacífico (TPP) dependerán de cómo se implemente en la legislación nacional, de los reglamentos y normas de aplicación integral, así como de la revisión del documento final.

“El TPP implica compromisos que México nunca antes firmó en otro acuerdo y dependerá de cómo implementemos esta arquitectura legislativa, y del andamiaje, para competir con los asiáticos”, señala Arturo Rangel Bojórquez, Presidente de la Comisión de Comercio Exterior de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA).

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Según su lectura, el especialista considera que ahora viene la tarea más complicada: la implementación de esas reglas en la legislación local. Añade que al igual que hace 20 años se realizaron diversas modificaciones con la firma del TLCAN, hoy se tendrán que hacer cambios y adaptaciones, e incluso desarrollar legislaciones que se prometieron en las negociaciones, como en lo referente a transparencia y anticorrupción. Estas son cuestiones que hoy están abiertas y que se deberán abordar.

A su vez, José Antonio Vidales Flores, Presidente de la Confederación de Asociaciones de Agentes Aduanales de la República Mexicana (CAAAREM), aclara que si bien dentro de las negociaciones de este acuerdo se buscó blindar aspectos que pudieran afectar a los productores nacionales, habría que revisar el documento final.

“Habrá que cuidar la redacción final después de la revisión legal, para que refleje efectivamente lo negociado; pero me parece que en los textos que estamos viendo ahí lo indica”, dice Eduardo Solís Sánchez, Presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

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“Nos encontramos en una cancha pareja con los socios comerciales, porque ellos tienen muchas normas internas y regulaciones que a veces prohíben la exportación de vehículos de otros países aunque sean socios, pues son formas no arancelables. En igualdad de circunstancias no le vemos ninguna afectación producto del TPP, al contrario”, puntualizó.

En este sentido, Eugenio Paci Hernández, Presidente del Sector de Industria Automotriz de la CANACINTRA, sentencia: “México es el cuarto productor a nivel mundial de vehículos pesados y el segundo exportador de tractocamiones, de modo que si las reglas contenidas en el TPP se negocian bien y en igualdad de circunstancias, obtendríamos un gran beneficio”.

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