Con el objetivo de unificar sus empresas bajo una misma identidad, proyectar su imagen por las carreteras mexicanas y sumar una nueva división de negocio a su portafolio de servicios, Transportadora y Distribuidora Isabel, y Transportes Bueno se preparan para una transformación gráfica que las harán aún más visibles a los ojos del mercado.

En esta nueva etapa, los “chabelos” cambiarán de nombre para agruparse bajo el de su empresa hermana, Transportes Bueno, la cual se dividirá en tres ramas de negocio: líquidos, representada por lo que actualmente es Transportadora y Distribuidora Isabel; dedicado, constituida principalmente por su servicio a tiendas de autoservicio, y una nueva modalidad de carga consolidada.

A la fecha, Transportadora y Distribuidora Isabel cuenta con 77 unidades equipadas con tanques de aluminio y acero inoxidable, los cuales suman alrededor de 155 entre fulles y sencillos, dedicados a la atención de Pemex y a la transportación de productos petroquímicos para la industria privada.

Por su parte, Transportes Bueno suma una flota de 90 vehículos y 216 cajas, en su mayoría de 40 pies enganchadas en la modalidad de full. El 40% de la operación de la empresa está concentrada en Centroamérica, precisó Sergio Bueno, Director General de ambas empresas.

Manifestó también que en los próximos meses seremos testigos de esta transformación y del lanzamiento de la nueva división de carga consolidada, un proyecto que desde hace tiempo tiene en mente y llegó el momento de concretarlo, enfocado principalmente en la zona del bajío y el sureste.

El directivo explicó que en una primera etapa ofrecerá el servicio consolidado a sus clientes actuales, para poco a poco ir midiendo sus alcances. La flota destinada para arrancar con esta división consta de tres camiones rabones y cinco tractocamiones, equipados con cajas de 53 pies.