Tras una inversión de aproximadamente 500 millones de dólares, Mercedes-Benz Vanes abrió las puertas de su nueva planta en North Charleston, Carolina del Sur; dedicada a producir la Sprinter para el mercado de América del Norte.

La firma de la estrella de tres puntas emprendió este proyecto en marzo de 2015, luego de considerar el alto potencial de mercado de este vehículo en esta región.

«Estados Unidos ya es el segundo mercado más grande de nuestra Sprinter en la actualidad. Con el nuevo sitio de producción de vanguardia en Carolina del Sur, podremos suministrar a nuestros clientes en América del Norte aún más rápido y con más flexibilidad en el futuro”, dijo Volker Mornhinweg, Director de Mercedes-Benz Vanes.

Cabe mencionar que desde 2006, en la sede de en North Charleston, se ha producido la Sprinter desde kits de ensamblaje importados de Europa; ahora, con las nuevas instalaciones, se contará con una línea de producción completa. La armadora estima que el área comercial podrá satisfacer la creciente demanda de clientes en Norteamérica de forma más económica y reducir significativamente los plazos de entrega en este mercado.

Así, se amplía a la planta de ensamblaje existente de Mercedes-Benz Vanes con instalaciones que incluyen taller de carrocería, de pintura y montaje final. Además, la compañía está implementando sus tecnologías y conceptos de producción más innovadores, por lo que es una de las ubicaciones más modernas de su tipo en Norteamérica y una parte integral de la red de producción global de la división de vehículos comerciales ligeros de la marca alemana.

Con esta expansión, la planta abarca casi 10 millones de pies cuadrados, que incluye un área de producción y construcción de oficinas de alrededor de 1.8 millones de pies cuadrados, complementados con espacio libre y de logística.

Las innovaciones se centran en la conectividad y la comunicación digital en la fabricación debido a las crecientes demandas de flexibilidad y eficiencia en la producción y a la diversidad de variantes de vehículos y cifras de ventas que continúan aumentando.

«La nueva planta en North Charleston combina nuestra experiencia y experiencia global que resulta en una instalación de vanguardia en todos los aspectos. Es un activo valioso que completa nuestra red de producción global. Nuestra prioridad en Mercedes-Benz Vanes durante el proceso de planificación de esta instalación fue la máxima flexibilidad”, expresó Frank Klein, Jefe de Operaciones de esta división.

La sede, que fabricará la Sprinter bajo las marcas Mercedes-Benz y Freightliner, empleará a más de 900 personas, ese número crecerá hasta 1,300 para fines de 2020. Según las estimaciones, los proveedores crearán 600 plazas adicionales en North Charleston y sus alrededores.

Los colaboradores también se beneficiarán de la digitalización de esta planta, ya que se minimizan las tareas rutinarias y repetitivas, dándoles más tiempo para un trabajo de mayor valor. Las innovaciones sobresalientes incluyen sistemas de transporte autónomos, el cambio a la comunicación digital sin papel y nuevas oportunidades proporcionadas por la capacitación virtual.

La apertura de las nuevas instalaciones coincide con la llegada al mercado norteamericano de la tercera generación de la Sprinter.  Entre sus innovaciones destacadas se encuentran los nuevos sistemas multimedia MBUX, el concepto de control y visualización en la cabina, así como asientos con forma ergonómica y modernos sistemas de asistencia, algunos de ellos fueron tomados del sector automovilístico y, por primera vez, encontraron su camino en un vehículo comercial Mercedes-Benz.