Como parte de su operativo al transporte, el Instituto de Verificación Administrativa (INVEA) realizó operativos en 63 puntos entre Centros de Transferencia Modal (CETRAM), paraderos, lanzaderas y bases, con el objetivo de revisar la documentación y las condiciones físico mecánicas de autobuses y vanes.

De dichas inspecciones se determinó la suspensión de 205 unidades a las que le retiro la placa hasta cumplir con la normatividad. Los propietarios tienen 20 días para corregir las condiciones de las unidades.

“Estamos encontrando vehículos con más de 10 años de antigüedad, cuya documentación tampoco es vigente. Esto significa que los pasajeros están indefensos ante algún accidente”, indicó Idalia Salgado, titular del INVEA.

De las 205 unidades sancionadas, 24 fueron remitidas al depósito vehicular por carecer de documentos como la licencia-tarjetón y la tarjeta de circulación.

Es importante señalar que se considera a una unidad con malas condiciones físico-mecánicas cuando tiene alteraciones de cromática, carrocería en mal estado, vidrios polarizados o rotos, falta de rótulos, luces interiores o exteriores que no sirven, llantas planas o calaveras rotas.