Al menos 23% de las empresas de transporte público concesionado, incluidas algunas que operan bajo el modelo de Metrobús, afrontan déficit en sus finanzas y dificultades para mantener estándares de operación y calidad del servicio al haber perdido alrededor de 20% de su demanda de usuarios en el último año, señaló la empresa de este ramo Corredor Insurgentes S.A. de C.V. (CISA).

A través de un comunicado, la transportista detalló que al modificar el equilibrio tarifario, servicios masivos y más económicos como el Metro y el Sistema M1, absorbieron la demanda de sus usuarios.

Jesús Padilla Zenteno, Presidente de CISA, señaló que se tenía que autorizar el aumento de la tarifa global en la capital y no solo del Sistema M1, ya que esa decisión afectó de manera significativa a todos los demás.

“En particular a nosotros, todo el grupo –excepto Metrobús–, perdió 20% de la demanda con el último ajuste tarifario. Para pronto: se desplomó el negocio”,  expresó el también presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM).

CISA también recordó que el costo del combustible ha sido otro factor en este impacto financiero, pues desde enero de 2017, cuando el Gobierno federal inició la liberalización del mercado de combustibles, el diesel se ha incrementado hasta los  20.07 pesos por cada litro, de acuerdo con datos de la Comisión Reguladora de Energía (CRE).

“Nosotros planteamos que la tarifa es un componente más de la sustentabilidad de este negocio, que tiene que ver con muchas otras cosas”, explicó.

En su opinión, ésta tiene que ser una ecuación donde se tome en cuenta la demanda, es decir, el número de usuarios, el tipo de vehículo, el costo financiero o crédito, el tipo de combustible, el número de socios, el monto de la tarifa y, sin duda, el componente del subsidio.

De acuerdo con Padilla, hacia el final del año, el Gobierno de la Ciudad de México deberá destinar al menos 1,000 millones de pesos para subsidiar la operación de Metrobús, cantidad que representa un subsidio de tres pesos por cada viaje y, al mismo tiempo, es equivalente a los recursos federales que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes reasignó este año a las obras de ampliación de la Línea 12 del Metro.

El presidente de CISA explicó que desde que este sistema BRT comenzó su expansión, la sustentabilidad de la tarifa empezó a minarse. Es por ello, que desde 2009, cuando se inauguró la Línea 2, se propuso al Gobierno que los transbordos tuvieran un costo proporcional.

Asimismo, calificó como esperanzador el inicio de la nueva administración, con la cual, aseguró, trabajarán para seguir con la modernización del transporte y apuntalar los proyectos que, como la principal empresa operadora de la Ciudad de México tiene en puerta en beneficio de los capitalinos.