En México, dentro de este mercado,  el sector transporte es el que más consume este tipo de productos, seguido de la industria automotriz con 220 millones de litros, y el resto es para la industria en general, con 210 millones de litros en el mismo periodo.

Jorge Fernando Zavala Luna, Gerente Técnico de Grupo Pochteca División Lubricantes, comentó que el aceite para motor representa el mayor volumen de ese consumo, debido a que tiene intervalos de cambio más cortos, mayor capacidad en depósito y trabaja en condiciones más severas.

Así, el volumen total de aceites para motor a Diesel es superior  a los 200 millones de litros por año, lo que representa el 87% del consumo total de lubricantes; 9% lo constituyen aceites para engranes; 3% grasas y uno por ciento los fluidos para tractor.

Durante su ponencia en el 5º Congreso Internacional de Transporte –organizado por la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM), el especialista del macro distribuidor de Shell en México, afirmó que los de tipo sintéticos están diseñados para aumentar la productividad de las unidades de carga y reducir costos de operación para los transportistas.

Se trata de lubricantes de alta tecnología que cumplen con los requerimientos de fabricantes de equipo original y con los más altos estándares internacionales para la reducción de emisiones contaminantes al ambiente. Además, reducen el consumo de combustible y de aceite, prologan los cambios y proporcionan mayor vida útil a los componentes de las unidades de carga.

Pochteca Lubricantes ofrece un portafolio de productos Shell Rimula, Shell Spirax y Shell Gadus, con tres niveles de protección: línea principal, Premium y avanzado.