En las últimas décadas la forma en la que se adquiere un vehículo de trabajo ha evolucionado, antes se compraba lo que las armadoras ofrecían, hoy éstas desarrollan sus productos considerando las necesidades específicas de cada comprador y repondiendo a las exigencias de su actividad.Screen shot 2014-12-05 at 12.59.35 PM

En la actualidad, el vendedor, el área de ingeniería y el cliente trabajan de la mano en la elección de la configuración del chasis, el motor, la capacidad, la transmisión, la dirección, los ejes, la suspensión, las llantas, el modelo y el color de pintura y hasta el equipo aliado. El objetivo que se persigue es que la unidad otorgue un alto rendimiento de combustible así como el más bajo costo durante todo su ciclo de vida.

  1. En las armadoras de vehículos, los proveedores abastecen de los componentes para armar las unidades y en las líneas de producción, se programa el pedido.
  1. Se eligen los largueros que formarán los distintos bastidores para cada aplicación, uno tras otro.
  1. Se colocan los soportes necesarios, muelles y elementos que se precisan conforme a cada modelo. Más tarde la unidad se pinta y se envía a colocarle los arneses eléctricos y las mangueras para su funcionamiento.
  1. A la par corre otra línea que abarca el motor, el radiador y las transmisiones; ambas se juntan para completar el chasis. Posteriormente se conecta el tanque y las baterías.
  1. En otra línea se arma la cabina, que primero se pinta y luego se ensambla con el chasis. En algunas armadoras el proceso lo realizan robots.
  1. En la parte final del proceso se vierten los fluidos como aceite, diesel, líquido para dirección, anticongelante –entre otros– y se instalan las llantas.
  1. Se alínea y se prueban todos sus sistemas, como el de frenos.
  1. Una vez lista la unidad, se traslada a la distribuidora y se entrega al cliente.

Aun cuando la vida útil de cada unidad depende por supuesto del mantenimiento y el uso que se le da, según datos de la Asociación Nacional de Productores de Camiones y Tractocamiones (ANPACT), en promedio un camión debe recibir mantenimiento cada 20,000 km y ser afinado cada 16,000 km.