La armadora destacó que para garantizar el transporte libre de emisiones es imperativo que se establezca una infraestructura de reabastecimiento de combustible.
Para la compañía, la construcción previa de la infraestructura de carga será esencial para lograr el aumento en la participación de camiones eléctricos.
Ante la creciente demanda de chips, la empresa anunció la inversión de 400 millones de euros, con el fin de poder brindar una mayor soporte a sus clientes.
Las operaciones de los vehículos eléctricos, utilizados para servicios de logística y recolección de basura inician a pocos días de que Mercedes-Benz inicie su producción en serie.