La importación de vehículos pesados usados acelera el paso en México, con un incremento exponencial de 94.2% anual en el primer semestre del año, impulsado por la demanda del mercado y la fortaleza del peso frente al dólar.

Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), informó en conferencia de prensa que, entre enero y junio, ingresaron al país 7,045 vehículos pesados usados. 

Se trata de un crecimiento anual de 94.2% frente a las 3,627 unidades de carga y pasaje reportadas en igual periodo de 2022.

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Factores que favorecen el ingreso de usados

La demanda del mercado mexicano de estas unidades repuntó con fuerza en el primer semestre, luego de caer 33% en igual lapso de 2022, debido a la mayor demanda del mercado y a la influencia del tipo de cambio.

Los factores para que haya crecido exponencialmente es la demanda, la escasez de vehículos nuevos, tal vez los tiempos de entrega, pero también el tipo de cambio, porque ahora los están adquiriendo a un precio mucho menor

Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la ANPACT.

Los datos compartidos por la ANPACT reflejan que cada día ingresan al país un promedio de 39 vehículos pesados usados, provenientes de Estados Unidos. 

En el primer semestre del año, las distribuidoras comercializaron 24,494 vehículos pesados, al menudeo, refieren cifras de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA). 

Así que, las unidades importadas de modelos más antiguos representan un tercio del mercado de nuevos y con tecnologías más eficientes, en México. 

En reiteradas ocasiones, el Presidente Ejecutivo de Asociación de productores ha expuesto que los vehículos pesados usados son en su mayoría unidades “chatarra” perjudiciales para la economía y para la sociedad, en materia ambiental y de seguridad vial. 

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