Para mantener en óptimas condiciones a tu mejor aliado de negocios existen pasos sencillos, de rutina, pero de suma importancia.

Las unidades Volvo fueron creadas con el propósito de responder a distintas aplicaciones en campo, para optimizar la eficiencia del conductor, del combustible y la rentabilidad del propietario y, por supuesto, estas medidas preventivas ayudarán a evitar el paro de tu unidad:

COMPRUEBA EL NIVEL DE ACEITE DEL MOTOR

Checar con frecuencia que el vehículo tenga un nivel aceptable de aceite de motor es una medida preventiva que consigue que el motor funcione bien y de manera óptima durante un largo tiempo, evitando que se estropee.

Recuerda que para revisar el nivel de aceite del motor, este debe estar frío; se recomienda que el vehículo esté en una superficie plana para obtener una medida más precisa y, en caso de que el aceite presente degradación, requerirá un cambio inmediato.

VERIFICA EL ESTADO DEL SISTEMA DE REFRIGERACIÓN

Revisa siempre antes de salir a carretera el nivel del líquido refrigerante, ya que en viajes puede ocasionar fallas adversas, derivadas del sistema de enfriamiento, y puede interrumpir tu camino.

Recuerda que el nivel del líquido refrigerante siempre debe estar entre las marcas de máximo y mínimo, y se debe verificar diariamente. Utiliza el líquido refrigerante recomendado por Volvo, pues un daño en el sistema de refrigeración provocará un constante calentamiento de la unidad y otras fallas de consideración. Si el vehículo pierde constantemente líquido refrigerante, es probable que tenga una fuga. No pierdas tiempo y contacta al concesionario más cercano.