La estructura de SAF Holland en México está creciendo. La regionalización del mercado exige, por un lado, presencia física en todo el territorio nacional, y por otro, un servicio personalizado según las necesidades y exigencias de cada usuario.

Por esta razón, la marca decidió hacer ajustes organizacionales y definir cinco gerencias regionales: Norte, Centro, Sureste, Bajío y Pacífico. Josué Reyes Guevara, Gerente de Cuentas Nacionales, explica que el comportamiento de la industria de vehículos pesados ha evolucionado para trabajar aún más de cerca con los proveedores.

Y no solo hablando de producto, aclara, sino del servicio postventa, asistencia técnica y mercado de refacciones: “El objetivo es acompañar al cliente, en todo momento, tanto a fabricantes de equipo original como al usuario final”.

El reto es que los vehículos de los transportistas tengan estancias en el taller más cortas, de tal manera que el uptimeno se vea mermado por mantenimiento -—preventivo y correctivo— de los productos de la marca.

“Esto quiere decir que mientras los transportistas se siguen profesionalizando, dándole mayor atención a sus llantas, a las condiciones de sus unidades y éstas permanezcan en carretera trabajando, lo que está de nuestra parte también será garantía de rentabilidad, eficiencia, ahorro de costos y hasta diminución del impacto ambiental”, señaló.

Y tras la llegada de Mike Pérez al frente de las operaciones de la marca en el país, el paradigma también cambió, ya que el directivo tiene experiencia en la industria de los fabricantes y eso le da una mayor sensibilidad ante las exigencias y requerimientos del sector.

La concentración de los esfuerzos en el apoyo técnico y en la postventa, va más allá de la quinta rueda y hoy ratifica su robusto portfolio, que incluye suspensiones y ejes, a fin de que los usuarios tengan la certeza de la calidad del producto y del servicio de SAF Holland.