Standard & Poor’s Global Ratings confirmó su clasificación de Excelente para Navistar Financial, S.A. de C.V., SOFOM, E. R. como administrador de activos de financiamiento comercial en el mercado mexicano, dicha clasificación refleja las subclasificaciones de excelencia tanto para la capacidad gerencial, estructura organizacional y administración de cartera.
La empresa norteamericana de servicios financieros destacó el experimentado equipo gerencial y personal que la compañía tiene; además de una estructura organizacional que garantiza la adecuada segregación de las funciones, una sólida plataforma tecnológica, planes de continuidad de negocio y recuperación de desastres bien documentados, mecanismos adecuados de control interno que garantizan un control adecuado de las operaciones de la empresa y políticas y procedimientos integrales.
No obstante, S&P consideró que la armadora puede mejorar su programa de capacitación para incluir a todos los empleados, agregando más capacitaciones técnicas y de desarrollo de otras habilidades. Además, a pesar de que el número promedio de horas de capacitación ha aumentado en comparación con la última revisión, todavía está por debajo del promedio de otros administradores de activos calificados.
Por otro lado, aunque la tasa de rotación de personal disminuyó a 11.81% en septiembre de 2017, de 14.52% observado en diciembre de 2015 (fecha de la última revisión de S&P) y de 29.27% de diciembre de 2016, este número permanece ligeramente por arriba de lo que reportan otras empresas evaluadas. En este rubro, cabe mencionar que el año antepasado la compañía reemplazó las plazas vacantes de alta y media dirección, de manera tal que la continuidad del negocio no se vio afectada; sin embargo, las altas tasas de rotación sostenidas podrían afectar la capacidad operativa del brazo financiero de Navistar.
En opinión de S&P, la compañía continúa siendo competente en las funciones de registro de nuevas operaciones en el sistema de cobranza, seguimiento de documentos, procesamiento de pagos, reporte a inversionistas, servicio al cliente y recuperación de activos. Asimismo, ha fortalecido su cobranza de las carteras morosa y vencida mediante la contratación de más agentes de cobranza y mediante una reducción del tiempo en los tiempos de cobranza.
Finalmente, la calificadora modificó la perspectiva a negativa de estable. “En nuestra opinión, la compañía, a pesar de implementar varias medidas durante 2017 para contener el porcentaje de contratos en incumplimiento de la cartera administrada, no ha podido reducirlo a sus niveles históricos anteriores (2012-2014)”, cita en un comunicado.
En este tenor, los niveles actuales de las carteras morosas y en incumplimiento, a pesar de mostrar ligeras mejoras respecto a lo observado en esta última revisión, continúan siendo más altos. S&P advirtió que podrían bajar la clasificación en los próximos 12 meses si no se observan mejoras considerables de las carteras morosas y en incumplimiento derivadas de nuevas medidas implementadas en esta área. De lo contrario podrían afirmarla.
