Para lograr el fortalecimiento del mercado interno es necesario reducir las importaciones de “basura vehicular”, la cual ha distorsionado totalmente el mercado de automotores nuevos, en esto coincidieron las asociaciones cúpula de la industria automotriz.
En el segundo encuentro de “Diálogo con la Industria Automotriz”, directivos de agrupaciones como: la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), la Asociación Nacional de Comerciantes en Automóviles y Camiones Nuevos y Usados (ANCA), la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), y la Industria Nacional de Autopartes (INA), explicaron que se ha incrementando de manera alarmante la importación de vehículos usados, vía amparos que permiten no cumplir con el decreto de importación de autos.
Por lo anterior, solicitaron que se revise la actuación de magistrados y jueces de Baja California, lugar donde se han emitido los amparos. De hecho, desde hace años se sabe que son cinco los amparos por los que se han podido importar alrededor del 80% de las unidades, los cuales no cumplen con ningún tipo de verificación de condiciones físico-mecánicas.
Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), dijo que de 2009 a la fecha se han importado 31,671 vehículos pesados, lo que representa poco más de 30% de las ventas de unidades nuevas: “En los dos primeros meses del año han llegado al país 5,391 automotores, por lo que es necesario poner un freno, si van a entrar deben de cumplir con la reglamentación y no ser una chatarra”.
En 2009 se importaron 3,513 vehículos usados; en 2010 fueron 6,651; en 2011 la cifra alcanzó las 7,005 y el año anterior fueron 11,647, para este año pueden superar las 15,000 unidades lo que significaría condenar a la industria a continuar con una edad promedio superior a los 17.5 años y con la circulación de camiones que no cumplen con normas de seguridad.
