De acuerdo con información proporcionada por las empresas fabricantes de llantas existen diversos factores que deben considerarse para asegurar que la correcta presión de inflado de la llanta se mantenga. El primero de ellos lo representan las instalaciones de mantenimiento.
Éstas deben contar con un buen compresor de aire, las líneas de aire tienen que estar equipadas con filtros para agua y reguladores de presión. Es importante que las tuberías de lubricación, no estén conectadas con la línea de aire usada para inflar las llantas.
Un secador de aire es fundamental para eliminar la humedad no deseada de las líneas de aire. Sin embargo, si no se cuenta con ésta, las líneas de aire deben ser drenadas (purgadas)regularmente.
Cualquier persona que revise la presión de aire en las llantas, debe estar equipado con un buen calibrador (medidor) de presión para llantas de camión. Éstos deben ser verificados semanalmente en el vástago de válvula instalado en la línea de aire que es verificado semanalmente con el medidor de presión maestro. Los medidores de presión que estén descalibrados en un 5% o más, deberán ser recalibrados o sustituidos.
Las llantas deben estar equipadas con tapones de metal en la válvula. No se recomienda utilizar los tapones de plástico que vienen con los vástagos de las válvulas nuevas. Inflar a través de los tapones integrados de válvulas es aceptable y también ahorra tiempo.
La verificación del inflado de la llanta
Las presiones de inflado de los neumáticos deben ser verificadas tan frecuente como sea posible. Las llantas de camión pierden aire por diversos motivos:
- Por lo permeable del sellante y que pasa a través de la llanta.
- Porque el aire se escapa entre la ceja y la rueda (rin)
- Por válvulas apretadas incorrectamente, empaques de hule, o núcleo de la válvula bloqueados por la suciedad.
- También por los objetos penetrantes que las llantas pueden recoger durante el camino.
Derivado de los factores antes mencionados entre más frecuente sea la revisión de las presiones, más probable es detectar y actuar sobre aquellas que requieren atención.
Así pues, es altamente recomendable que la presión de inflado de las llantas se revise una vez por semana. Si esto no fuera posible debido a la propia operación de la flota, es conveniente programar las revisiones tan a menudo como sea posible. Muchas flotas utilizan el mantenimiento preventivo del tractocamión, como el intervalo para verificar las presiones de la llanta y eligen un intervalo arbitrario para comprobar presiones de la llanta del semiremolque y del dolly semanalmente, mensualmente, bimensual, etcétera.
En caso de que se detecte que la presión de inflado es incorrecta por más de 2 o 3 psi, es necesario investigar la razón.
Es recomendable –si se elige algún intervalo–, colocar en los vehículos en un lugar visible, una calcomanía que indique la presión de inflado, la fecha en la que se midió e incluir un campo en el que se pueda escribir la fecha cuando se haga la medición la siguiente vez.
Adicionalmente es conveniente tener impresa en la calcomanía las presiones de inflado recomendadas. Ésta calcomanía le avisará claramente a cualquier persona que le dé servicio al vehículo cuándo revisar las presiones de inflado y cuál debe ser la presión correcta en frío.
Calibradores precisos
En esta tarea es imprescindible contar con calibradores de presión precisos para verificar el inflado de la llanta. No basta la revisión visual del costado de la llanta para definir su presión, ya que el tipo de construcción de la llanta, la cual afecta la deflexión de los costados, varía considerablemente entre fabricantes de llantas y de un diseño de llanta a otro.
Es fundamental que las presiones sean revisadas cuando estén frías las llantas; es decir, antes de que hayan rodado. El momento ideal para hacerlo es por la mañana o antes de que el vehículo haya sido conducido 1.5 km. Una vez que el vehículo haya rodado, puede tomar de 3 a 4 horas para que las llantas se enfríen. Puesto que el calor incrementa la presión, nunca debe retirarse aire cuando las llantas estén calientes porque se pueden llegar a desinflar. El incremento normal en la presión debido a las condiciones de servicio puede ser de entre 10-15 psi o más, y es normal. Solamente se puede extraer aire de las llantas cuando estén frías, con el fin de llevarlas una vez más a su presión de inflado adecuada.
Al calibrar todas las llantas del vehículo, es necesario averiguar cuál se encuentra con menor presión de inflado que el resto. Si alguna de ellas está 20% debajo de la presión de inflado recomendada, se considera «presión baja» y debe ser retirada del vehículo, desmontada, y además examinada cuidadosamente, para determinar la causa de su pérdida de aire.
Ya sea el operador o el mecánico encargado del mantenimiento debe cerciorarse de verificar todas las llantas del vehículo, incluyendo a las interiores de los duales. En caso de que los agujeros para mano de los rines/ruedas no estén alineados, haciendo inaccesible el vástago de la válvula interior del dual, la rueda externa debe ser realineada; de modo que pueda ser revisada la presión de inflado de la llanta interior.
