El mercado de vehículos pesados vivió un 2024 de ventas récord, con más de 60,000 unidades colocadas al mayoreo; es un resultado positivo, pero insuficiente en una economía donde la antigüedad de la flota se mantiene cercana a los 19 años. En este contexto, la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) impulsa una agenda alcanzable y que atiende puntos clave para avanzar hacia un parque vehicular más moderno. 

Rogelio Arzate Tapia, Presidente Ejecutivo de la ANPACT, comparte en entrevista las acciones más sobresalientes de trabajo junto a su equipo, con el objetivo de incidir en un mercado interno más sólido y, por lo tanto, en un autotransporte de carga y pasaje moderno, seguro en la operación, más amigable con el medio ambiente y, claro, eficiente, en un contexto más competitivo para hacer negocios.  

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La industria representada por la ANPACT ha propuesto que el Gobierno federal destine un fondo anual de entre 2,000 y 3,500 millones de pesos para la renovación de flota, con objeto de priorizar el financiamiento de los hombre-camión y pequeñas empresas del autotransporte, que representan 97.1% del total de los servicios público y privado de carga, pasaje y turismo registrados ante la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), al corte de agosto.

Este programa lo queremos enfocar en los hombre-camión, o mejor dicho, en las familias-camión y en los pequeños empresarios, para que esto se haga un círculo virtuoso. Si ellos tienen los apoyos adecuados, es decir, mejores tasas y si también la formalidad es parte de todo este programa, van a poder acceder a esos vehículos”, comparte. 

Escucha aquí el episodio completo con Rogelio Arzate:

Chatarrización de 6,000 unidades al año

De acuerdo con estimados de la Asociación, el presupuesto proyectado es suficiente para cada año introducir en circulación 6,000 unidades más modernas de distintas configuraciones y tecnologías, con el objetivo de, a largo plazo, reducir 10 años la antigüedad del parque vehicular en México, y una de las claves es que el proyecto sea sostenible con el tiempo. 

La edad de la flota es de 19 años, y nosotros queremos bajarle 10 años. Este programa se tiene que repetir de forma anual, los recursos obviamente son finitos, pero creemos que el 15% del valor de la unidad puede ser un fondo que se otorgue a los pequeños y microempresarios para renovar su flota”, detalla Arzate Tapia, quien tomó el liderazgo de la ANPACT a partir del 1º de julio del año pasado. 

Para que el plan se materialice y sea exitoso, se requiere la intervención de distintas autoridades: de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), el Registro Público Vehicular (REPUVE) y Plataforma México, para tener un seguimiento fidedigno y comprobable de la chatarrización. Aquí el proyecto del Gobierno federal de digitalizar los procesos es fundamental. 

Buscamos que existan unidades chatarrizadas verificadas y, desde el punto de vista digital, tener dentro del sistema REPUVE y de la Plataforma México, un campo que indique que el vehículo está chatarrizado” añade.

También se requiere el involucramiento de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), de Nacional Financiera (NAFIN), el Servicio de Administración Tributaria (SAT), la SICT y los distintos Gobiernos de los estados, para que sea una propuesta integral que abarque distintas aristas, como la educación financiera difundida por la Banca de Desarrollo y la formalización de las empresas con la autoridad fiscal. 

Financiamiento más accesible, clave

En la estrategia, que toma como base la experiencia previa de chatarrización de unidades en México, pero con mejoras para incrementar su éxito y permanencia, se busca que el financiamiento a los micro y pequeños transportistas deje de ser considerado de alto riesgo. Esto se aborda desde tres trincheras: la legislación para dar mayores herramientas legales a los participantes en el mercado, la formalización de empresas y la educación financiera.  

Un tema importantísimo para bajar las tasas de interés es el proceso de recuperación de bienes. En México debemos trabajar en políticas públicas que ayuden a que, cuando existe un financiamiento y alguien no está pagando adecuadamente, el vehículo pueda ser recuperado lo más pronto posible. Esto quita riesgo y las tasas de interés pueden bajar”. 

Dentro de la propuesta también queremos trabajar con el SAT, para tener esquemas de formalización con un proceso soft landing, para que a las empresas se les facilite crecer su negocio y puedan tener estos beneficios adicionales en renovación de flota, como los ambientales y de seguridad”, añade el Presidente Ejecutivo de la ANPACT. 

Mercado secundario Vs importación de usados

En la estrategia, el mercado secundario de vehículos pesados tiene un papel relevante para tener un mayor alcance: “No solamente hablamos de unidades nuevas, sino de seminuevas certificadas por los fabricantes nacionales, que sean vehículos que se hayan vendido en México, no chatarra de Estados Unidos”.

El mercado secundario se convierte en un jugador clave ante el incremento exponencial de la importación de pesados usados provenientes de Estados Unidos, que en 2024 alcanzaría el ingreso de unas 31,000 unidades, nivel nunca visto.

Hay preocupación en la industria, y la solicitud que se mantendrá será que el Gobierno federal genere un “piso parejo” para los participantes nacionales frente a los externos, así como una estadística aportada por los estados para saber dónde y cómo se movilizan estos vehículos. 

Transición energética

La transición energética también ocupa un espacio relevante en la agenda 2025 de la ANPACT. Aquí, la distribución estratégica, constante y sostenible de Diésel Ultra Bajo Azufre (DUBA) es apremiante, ante la migración del mercado hacia las tecnologías Euro VI y EPA 10.

En el proceso de la descarbonización del transporte, la industria de pesados mantendrá su posición para que el mercado cuente con energía eléctrica suficiente y generada de fuentes renovables o limpias. La última milla y el transporte de personas son los segmentos idóneos para avanzar en la electrificación de flotas, por sus características de operación. 

ANPACT ante Trump y el T-MEC

La industria de vehículos pesados es uno de los protagonistas en la integración comercial de la región, y la ANPACT defenderá la posición de México en el mundo como principal exportador de tractocamiones, y cuarto al sumar otras configuraciones. De inicio, Rogelio Arzate, quien fue negociador del T-MEC en el primer mandato de Donald Trump, asegura que la imposición de aranceles de 25% a México y Canadá sería un desastre.

Decir si un tema tarifario es probable o no dependerá de muchos factores, lo que sí puedo asegurar es que sería un desastre. En la ANPACT estamos convencidos de que se abrirán esos puentes y caminos para tener un diálogo adecuado en Norteamérica”, externa.

Legalmente, para 2026 se espera una revisión del tratado comercial, y las 15 empresas trasnacionales que representa la Asociación están listas para ello, conscientes de que la relación comercial de México con China será un tema dominante, que se debe abordar como región, no con la división de México, Estados Unidos y Canadá. 

Con un Trump duro con China, la ANPACT ve oportunidades para revisar qué proveeduría se puede traer a Norteamérica y en especial a México, no sólo desde esa economía, sino de Asia. En el panorama está previsto desarrollar una proveeduría nacional planeada con componentes estratégicos, que puedan instalarse en el país y que sólo se desarrollan en el continente asiático.