Sin duda, una de las barreras en la ruta hacia la electromovilidad en el autotransporte es la infraestructura de recarga para vehículos pesados eléctricos, por los desafíos que implica a nivel de inversión, regulatorio y la capacidad energética en el país.
Consciente de este reto, Deléctrico y Huawei Digital Power se unieron para disponer de un instalar la más avanzada electrolinera en Latinoamérica que, además de tener la tecnología de recarga más rápida para vehículos eléctricos opera bajo el esquema Charging as a Service (CaaS), poniendo a disposición de más flotas estas instalaciones.
Francisco Cabeza, CTO de Huawei Digital Power, calificó este sitio, ubicado en Tultitlán, Estado de México, como un “oasis energético”, a partir del cual se va a permitir que muchas empresas puedan utilizar la poca capacidad eléctrica que hay en el país y garantizar que la transición hacia la electromovilidad va a funcionar.
Por su parte, Gonzalo Gómez, Gerente de Desarrollo de Negocio de dicha compañía, comentó que el modelo CaaS ayuda a que las flotas ya no tengan que invertir y aprovechen las bondades de tener infraestructura instalada y paguen por la energía que utilicen.
Esto, dijo, también ayuda a que a la larga no se cuenten con más sitios de recarga de los que puede soportar la red eléctrica disponible en México: “Supongamos que cada quien quisiera tener su infraestructura de carga a nivel país, va a ser inviable que cada quien tenga un espacio de este tipo.
“Y viéndolo desde un punto de vista de inversión y lo que se necesita suministrar de energía realmente es inviable. De ahí que nosotros estemos apostando con Deléctrico a desarrollar este tipo de electrolineras colaborativas que permitan la recarga de distintos vehículos a nivel logístico”.
El directivo recalcó que esta solución de Deléctrico busca reducir esas barreras para la adopción de vehículos eléctricos entre las flotas.
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El desafío de la infraestructura
Diana Avalos, Directora General de la Asociación Mexicana de Impulso al Vehículo Eléctrico (AMIVE), reconoció que uno de los retos más grandes que el autotransporte está enfrentado en su camino hacia la electrificación es la infraestructura de recarga.
“El enfoque históricamente ha estado en promover que haya más vehículos eléctricos, lo cual es correcto y es un buen avance, pero la infraestructura de carga es importantísima, que tenga incentivos adecuados y políticas públicas con metas muy específicas para su expansión”.
La especialista señaló que esta infraestructura, particularmente para los vehículos pesados, es más costosa y complicada, por lo que llamó a tener las políticas integrales que incluyan este tema, para no “dejar solas” a las empresas resolviendo este problema.
Desde la trinchera de las empresas, la experiencia de Transportes Marva marca un precedente en la electromovilidad, pues 2021 ha trabajado en electrificar su flota con la firme convicción de ser líderes y pioneros en esta transición.
Esta compañía, que agrupa a Transportes Marva y Deléctrico, actualmente cuenta con 50 camiones Clase 8 con esta tecnología y seis puntos de recarga a nivel nacional. No obstante, de acuerdo con Manuel Lastiri, Ejecutivo Comercial de la empresa, la instalación de esta infraestructura fue uno de los principales desafíos al inicio del proyecto.
A ello se le sumó lo complejo que fue transmitir a sus clientes el concepto de electromovilidad y hacerles ver que si bien el servicio que se les estaba ofreciendo iba a ser relativamente más costoso en el corto plazo, en el largo plazo verían los beneficios.
“Fue complicado al principio, sin embargo nos tuvimos que alinear, nuestras estrategias a compañías multinacionales que tuvieran objetivos de reducir su huella de carbón, que tuvieran una estrategia global y, sobre todo, compañías progresivas en este sentido”.
Como resultado, Grupo Marva, de la mano de Huawei Digital Power lograron instalar un centro de recarga con Fusion Charge, siendo el primero en Latinoamérica América con esta tecnología, la cual está basada en refrigeración líquida, lo que la hace una solución a largo plazo.
Además tiene la capacidad de ir escalando a potencias más altas. De acuerdo con Gonzalo Gómez, podría llegar a entregar hasta 1.5 megawatts en un dispensador, logrando cargar un tractocamión hasta en 18 minutos: “Podemos llegar a eso y hacia allá va nuestra hoja de ruta”, dijo.
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