Los apagones recientes en diversas ciudades del país demuestran la vulnerabilidad y debilidad del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), que se encuentra colapsado por la falta de inversiones, lo que podría afectar al nearshoring, además de que las reservas están en los límites máximos, indicó la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex). 

“Esta situación, no sólo afecta el funcionamiento normal de las empresas  mexicanas, sino que también pone en riesgo la seguridad y la vida de los ciudadanos ante las extremas condiciones climáticas”, indicó la Coparmex a través de un comunicado.

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El organismo detalló que la demanda de electricidad que provocan las altas temperaturas llevaron al SEN a tocar su demanda máxima, pues alcanzó los 48 mil 472 Megawatts (MW) de energía consumida en una hora. 

Cabe detallar que el Margen de Reserva Operativa que establece la normatividad para que pueda  operar el SEN es de 6%, por lo que si se registran niveles más bajos, se debe declarar Estado Operativo de Emergencia; y las reservas operativas del sistema registradas ayer descendieron peligrosamente a menos del tres por ciento”.

Coparmex.

El organismo explicó que ante este panorama se enfrenta el riesgo de que los apagones detectados en 21 estados de país se repitan “y agraven por la vulnerabilidad del SEN. En el futuro la demanda incrementará más que la oferta”, alertó. 

Coparmex calificó considera que los apagones recientes reflejan una “crisis energética sin precedentes», la cual se debe a la falta de inversiones de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en infraestructura como en centrales eléctricas de generación, transformación y distribución de energía, lo que además provoca un aumento en los precios en regiones con restricciones en la capacidad. 

De acuerdo al Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (Prodesen), de los 232 proyectos instruidos por la Secretaría de Energía  (SENER), la CFE sólo ha realizado nueve. 

“Es urgente ampliar la oferta de energía, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y el Centro  Nacional de Control de Energía (CENACE) deben permitir la integración de nuevas centrales eléctricas, principalmente del sector empresarial”, indicó la Coparmex. 

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Señaló además que se se deben garantizar las condiciones para una competencia justa, lo que permitirá que las inversiones de las empresas complementen las de CFE y se pueda generar una oferta de energía limpia, ya que se requiere una inversión anual para ampliar y modernizar las redes de transmisión y distribución de cerca de 9,000 millones de dólares.

«Desde Coparmex solicitamos a las autoridades iniciar mesas de diálogo lo antes posible para superar el desafío de contar con un Sistema Eléctrico Nacional confiable que promueva el bienestar de los hogares y las empresas mexicanas. Es imperativo que empresarios y Gobierno trabajemos juntos para lograr que los mexicanos cuenten con luz limpia, barata y sin apagones«.

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