Sin duda, la tendencia de electrificación de las flotas cada vez está acaparando la atención en los encuentros y exposiciones comerciales de vehículos pesados en México y el mundo. 

De acuerdo con el estudio “Global Electric Truck Market. Opportunities and Forecast 2021-2030” publicado por Allied Market Research, se prevé que el mercado mundial de camiones eléctricos se evalúe en 3,861 mdd para 2030, registrando una tasa de crecimiento anual compuesta de 26.4% de 2021 a 2030.

En México, un análisis de CALSTART concluyó que nuestro país puede lograr que un 36% de ventas de vehículos medianos y pesados nuevos sean cero emisiones para 2030 si establece metas políticas ambiciosas y crea un ecosistema de apoyo para acelerar el transporte con cero emisiones.

Al mismo tiempo, en territorio nacional ya hay 16 marcas –entre OEM y startups– que ofrecen vehículos comerciales eléctricos para los segmentos de pasaje y carga, así como de rangos ligeros a pesados. 

En este panorama, el Termómetro TyT de esta semana se dio a la tarea de indagar entre los transportistas sobre los retos que aún ven para apostar por la electrificación de sus flotas.

Este ejercicio de opinión, encontró que el 36.4% de los participantes considera que el precio del vehículo es el principal desafío en este camino hacia la electrificación.

Respecto al tema, cabe mencionar que expertos han compartido con TyT que si bien el costo de este tipo de unidades es más alto, sus beneficios inciden en otros aspectos de las finanzas de la flotas como mayor eficiencia.

Además, considerando aspectos como un menor mantenimiento y ahorros en el consumo de combustibles, los beneficios para la flota en el largo plazo hacen viable este tipo de tecnologías, dependiendo del análisis y ajustes que se tienen que hacer, sí o sí, en la operación.

Por otro lado, un 30.9% compartió su inquietud por la proveeduría de la energía. En este sentido, expertos han compartido con TyT la necesidad de iniciar este tipo de proyectos con la consultoría para construir correctamente un ecosistema para estas tecnologías, el cual incluye asesoría para saber si es posible instalar cargadores o cómo obtener energía.

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Concretamente, el Consejo Norteamericano para la Eficiencia de la Carga (NACFE, por sus siglas en inglés), señala como primer paso evaluar la infraestructura existente de los servicios públicos de energía. 

El Termómetro TyT , realizado a través del Twitter @revistatyt, también reveló que el 26% también ve como un desafío la infraestructura, un aspecto que, al igual que el punto anterior, se debe manejar en el proceso de consultoría.

Despejando estas dudas, CALSTART encontró que el costo de los vehículos eléctricos y la infraestructura de carga es la barrera más citada que limita la adopción de los vehículos cero emisiones. Sin embargo, múltiples estudios han demostrado que la paridad del costo total de propiedad con el diésel se logrará antes de 2030, y mucho antes en algunos segmentos como los autobuses y las camionetas de carga.

Finalmente, un 6.7% de los participantes señaló que la capacitación es el principal reto para la electrificación de su flota; no obstante, las empresas que ya han iniciado en este camino han señalado que sus socios OEM incluyen la capacitación a operadores y técnicos previo al despliegue de esta tecnología.

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