Aunque Grúas y Soluciones Logísticas (GSL) nació formalmente en 2008, su historia se remonta muchos años atrás, cuando el padre del fundador inició ofreciendo servicio de mudanzas con una camioneta de redilas.

Antes de que Carlos Salas fundara GSL trabajó muchos años en la empresa de su padre, quien había comenzado con las mudanzas, pero poco a poco fue diversificando el negocio hasta que se especializó en el servicio de grúas. 

Ahí fue donde Carlos aprendió el negocio y descubrió una de sus grandes habilidades: las relaciones personales. Conocer personas, escucharlas y entender qué es lo que necesitaban fue lo que le abrió camino, primero con su padre y después cuando decidió independizarse. 

De hecho años antes de emprender su propio camino consiguió un contrato muy importante con una empresa trasnacional que les permitió dar un salto cualitativo no sólo en términos de crecimiento, sino de aprendizaje para personalizar su oferta al grado de desarrollar soluciones exactamente a la medida de sus clientes. 

Israel Salas, hijo del fundador y actual director de operaciones de GSL, recuerda que desde niños, él y sus hermanos, acompañaban a su padre al trabajo, desde la empresa del abuelo, y se daban cuenta que tenía un talento natural para relacionarse, de tal manera que no era sorpresa que consiguiera más trabajo y, lo mejor, que sus clientes siempre estuvieran satisfechos. 

En los principios de GSL, Carlos Salas había desarrollado tal cantidad de contactos que tuvo la idea de congregar a distintos proveedores de servicio para solventar las necesidades de los clientes, es decir, conseguía trabajo para todos y él siempre coordinó y supervisó la calidad del servicio, pues desde siempre supo que ahí tendría que estar su principal diferenciador. 

Una vez consolidado el servicio en las grúas industriales, el fundador de GSL se dio cuenta de que los clientes requerían requerían, más que un proveedor, un aliado estratégico, de tal manera que decidió diversificar su operación y convertir su oferta, también, hacia la parte logística.

Esto fue, sin duda, lo que les dio un gran impulso, ya que desde sus orígenes, GSL se convirtió en una empresa pionera en la especialización dentro del segmento de grúas industriales, pues han dado servicio a proyectos de infraestructura, construcción y minería, entre otros.

Para reforzar la consolidación de la empresa, la familia Salas también invirtió en la capacitación del personal y en el desarrollo de condiciones para que sus colaboradores tengan un plan de carrera dentro de la compañía, a fin de afianzar su sentido de pertenencia y, a su vez, elevar el nivel de servicio para sus clientes. 

Y no sólo eso, sino que también han implementado prácticas de gobierno corporativo para definir bien los roles y responsabilidades tanto del fundador como de sus tres hijos, quienes de a poco se han ido incorporando a las labores de la compañía. 

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Es así como este sueño se ha consolidado por más de 15 años, aunque se trata de una tradición familiar que ya está permeando a la tercera generación, ávida de aprender y llegar a GSL hacia el futuro, sobre todo con las oportunidades que está generando el denominado nearshoring. 

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