El grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano (MC) promueve reformas a la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial, con el objetivo de regular a las escuelas para conducir.

El objetivo de regular las escuelas para conducir es promover la seguridad vial, para coadyuvar en la obtención o renovación de permisos o licencias de conducir que emita la autoridad competente.

La iniciativa de reforma, que se analiza en la Comisión de Movilidad, considera que:

Las escuelas para conducir son un centro docente certificado y facultado para impartir de forma profesional la enseñanza teórica y práctica de conocimientos, habilidades, aptitudes y comportamientos necesarios que permitan la conducción segura, responsable, y con ello promover la seguridad vial, para coadyuvar en la obtención o renovación de permisos o licencias de conducir.

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En la iniciativa de reforma de MC se establece que corresponde al Sistema Nacional de Movilidad y Seguridad Vial emitir los lineamientos correspondientes que permitan la uniformidad para la certificación de escuelas para conducir, así como de su personal en las áreas de dirección, instrucción y evaluación.

Movilidad y seguridad vial

La iniciativa plantea que las Bases de Datos sobre Movilidad y Seguridad Vial tendrán la información de los planteles certificados, así como de su personal en las áreas de dirección, instrucción, evaluación y los resultados de los exámenes que realice la autoridad competente.

Estipula que los Criterios de Movilidad y Seguridad Vial promoverán la capacitación del personal en las áreas de dirección, instrucción y evaluación de las escuelas para conducir.

Determina que corresponde a las entidades federativas la certificación de las escuelas para conducir y que esta evaluación se realizará cada tres años.

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La obligación por ley de reconocer y regular a las escuelas para conducir ayudará a que quien conduzca lo haga con seguridad, señala la iniciativa.

“No podemos esperar una movilidad y seguridad vial con visión cero, si quienes conducen no cuentan con los conocimientos teóricos y prácticos para que ello ocurra”, refirió MC.

Asimismo, observa que conducir con formación académica es una decisión que salva vidas, y si ésta es de calidad, permite adquirir los conocimientos, aptitudes y actitudes necesarios para conducir y enfrentarse a los retos de la movilidad con seguridad y responsabilidad.

Señala que para alcanzar la visión cero es necesario dar un enfoque ético a la seguridad vial y reducir el número de víctimas fatales o heridos graves en siniestros de tránsito. Es importante que quienes manejan tenga la preparación académica.