Los constantes cambios que enfrentan el mundo, la sociedad y la economía, como los causados por la pandemia o la elevada inflación, van sumando nuevas variables a los modelos de negocio existentes, y el autotransportes no está exento de esto; por ello, estar listos para adaptarse es un desafío para las empresas transportistas para hacer frente a los tiempos difíciles.
Hoy, las cadenas de suministros atraviesan por un entorno complejo que coloca a las firmas de logística y transporte en una posición complicada, pero también abren una ventana de oportunidad, ya que entender los componentes básicos y fundamentales de la organización, y cómo ésta agrega valor hacia proveedores, clientes y su propia estructura, podría convertirse en una ventaja.
Así lo considera Claudio de la Peña, director ventas y mercadotecnia de Daimler Truck México; quien en el podcast Radar TyT señala que hoy, en estos cambios de modelos de negocio, las empresas tienen que resolver variables, algunas de las cuales pueden estar bajo su control, pero otras no.
¿Qué va a pasar a futuro? No lo sabemos, tampoco somos parte de lo que está sucediendo a nivel mundial, pero en esto es mejor dejar de ser solamente espectadores y empezar a ser generadores y actores. Vale más estar preparado (…) Estamos en una industria de gente y empresarios que están en contingencias metidos en la acción», comenta.
Aquí puedes escuchar el episodio completo de Radar TyT:
En el momento que las empresas o nuestros socios de negocio se enfrentan a la resolución de variables se ponen en marcha las alianzas y ahí es donde se genera la cadena de valor o los valores agregados que una compañía puede dar o intercambiar con otra a través de su modelo de negocio.
De la Peña resalta la importancia de innovar en nuevos modelos de negocio y para conseguirlo recomienda entender el histórico inmediato, es decir, comprender lo que ha cambiado con el paso del tiempo para identificar los ajustes en el modelo, y con ello poder tomar lo que ya se ha probado y ha funcionado.
Como segundo punto, señala lo que se denomina como Rolling Forcast, o el cómo administras el día a día en el futuro inmediato y cómo te adecuarás a las variables que se ven próximas, poniendo como ejemplo una elevada inflación y cómo puede ésta restringir algunas de tus actividades.
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Asimismo, menciona que es necesario observar la estrategia a mayor plazo, como proyectar el modelo de negocio a 15 o 20 años, pero también estar monitoreando la estrategia a 3 o 5 años, para tener una mejor visión de las variables que con el tiempo podrían ajustarse y cómo afectarían a tu empresa.
«Son tres (recomendaciones): qué funcionó y que no funcionó de mi estrategia con base en históricos entre 3 a 5 años hacia atrás; qué está pasando con mi rolling forcast; y mi planeación estratégica a largo plazo, en cómo esta estructura tiene que adaptarse a tres posibles escenarios», detalla.
De la Peña destaca las ventajas de innovar el modelo de negocio, ya que permite al negocio anticiparse y ser más flexible para expandir o contraerse en la medida que la demanda y la situaciones mundiales lo vayan dictando.
«Innovar quiere decir tener una capacidad de adaptación a las circunstancias (..) Ésa es la mejor la mayor ventaja, hemos visto individuos y organizaciones, desde la parte empresarial hasta la parte política, que sobreviven, crecen y se vuelven sustentables en la medida que se van adaptando; y la adaptación viene ligada al cambio».
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