Los trabajos de modernización y ampliación a cuatro carriles de la autopista transvolcánica Colima-Guadalajara reanudaron sus operaciones después de tres años en pausa.
La gobernadora de Colima, Indira Vizcaíno Silva, dio el banderazo a la reanudación de las obras en la carretera que comprende 16.5 kilómetros y que estarán a cargo del Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras), así como de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).
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Desde 2019, los trabajos de la autopista Colima-Guadalajara se detuvieron a causa de amparos interpuestos por habitantes del ejido, quienes solicitaron que se cumpliera cabalmente con algunas obras complementarias y compensatorias que habían sido previamente acordadas, para permitir el acceso seguro a sus parcelas.
La mandataria estatal espera que la obra concluya entre seis y ocho meses en esta carretera, que también contempla concluir cuatro puentes, y que permitirá reducir tiempos de 40 minutos para quienes circulen de Manzanillo a Guadalajara.
Si tenemos el puerto más importante del país, merecemos tener las mejores carreteras del país, para que pase toda la carga que llega y sale del puerto de Manzanillo.
Indira Vizcaíno Silva, gobernadora de Colima.
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Por su parte, Ramiro Martínez Medina, coordinador de obras del Banobras, explicó que existe un avance del 94% en su primera etapa, por lo que queda pendiente un 6%, que incluye la conclusión de cuatro estructuras y las ligas entre el tramo existente que ya está en operación, además de los Puentes Atenquique, El Limón, Agua Escondida y Platanar.
En su intervención, la secretaria de Infraestructura, Desarrollo Urbano y Movilidad (Seidum), Marisol Neri León, destacó que este proyecto busca la mejora en el flujo de camiones y vehículos entre Colima y Jalisco, además de fortalecer la seguridad.