A menos de tres meses de que termine el año y ante la problemática que ha ocasionado la escasez de semiconductores en la industria automotriz, Toyota Motor Corporation adelantó que su pronóstico de producción para el año fiscal 2023 será más bajo que el anterior de 9.7 millones de unidades.
En su plan de producción mensual, la empresa nipona informó que la situación continúa siendo difícil debido a la falta de piezas, resultado de la propagación de Covid-19, por lo que tras una examinación detallada de la cadena de suministro estima que su plan de producción para noviembre sea de 800,00 unidades.
De esta cifra, 250,000 unidades corresponden a la producción en Japón y 550,000 a la producción en el extranjero. Con lo que Toyota mantendría el plan inicial de octubre que terminó ajustando a 750,000 unidades.
En tanto anunció la suspensión de 11 de las 18 líneas de producción en ocho de sus 14 plantas en Japón, del 1 al 12 de noviembre, mismas que podrían incrementar dependiendo de la solvencia de sus proveedores.
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Las plantas que resultaron afectadas con estas suspensiones son: Planta de Takaoka. Planta de Tsutsumi, Planta de Tahara, Planta de Kyushu Miyata, Planta de Iwate del este de Japón, Planta Miyagi Ohira, Planta Auto Body Fujimatsu y la Planta de Hamura de Hino Motors.
Toyota aprovecho nuevamente para disculparse con sus clientes quienes han estado esperando la entrega de vehículos, así como con sus proveedores, y otras partes interesadas
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