El cambio climático y los altos niveles de contaminación producidos por el sector transporte apresuran a los países al proceso de transformación hacia flotas electrificadas, pero aún hacen falta políticas públicas y programas de financiamiento que lo vuelvan viable, aseguró Fernando Páez, director de Movilidad Urbana para México y Colombia de WRI.

En el webinar Electromovilidad, el futuro ya presente del transporte: retos y oportunidades, Páez enfatizó que en términos de emisiones a nivel global el 24% son producidas por el transporte, para Latinoamérica el porcentaje alcanza los 30 puntos y para México alrededor del 35 por ciento.

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Asimismo, acentuó que el 8.7 millones de personas mueren en el mundo a consecuencia de la contaminación atmosférica por lo que es de vital importancia llevar al sector transporte a cero emisiones, lo que conduce a la electromovilidad.

El director de Movilidad Urbana de WRI explicó que la electromovilidad es una de la alternativas tecnológicas con las que el transporte público puede reducir la mayor cantidad de emisiones, considerando que su uso es muy alto.

En México cerca del 40% de la población, es decir, cerca de 50 millones de pesonas usan transporte público, además de que este sector mueve alrededor de 160,000 empleos asociacios a conductores de vehículos.

Así, para ir hacia ese proceso de tranformación de flotas se requiere de políticas públicas y programas de financiamientos que hagan posible el camino, pero también, señala que se requiere fortalecer institucionalmente, no solo la entidades de gobierno, sino a los operadores de transporte y buscar en conjunto mejores modelos de negocio.

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Sin embargo, un reto importante, también, es la infraestructura y los servicios de calidad.

Cuando hablamos de tecnología vehicular para el sistema de transporte público hay que considerrar elementos del vehículo mismo y la infraestructura necesaria para la carga, eso implica considerar aspectos como la planeación técnica, operativa y financiera.

Fernando Páez, director de Movilidad Urbana para México y Colombia de WRI

El experto afirma que se debe desarrollar un sistema en cuestión de las necesidades y caracteríastocas del sevicio considerando la tecnología que se tiene y dependiendo del contexto de cada lugar.

Como ejemplo, Fernando habló de México donde ya se consideran flotas eléctricas tanto en la Ciudad de México como en Guadalajara y a través de ello se ha comenzado a ver la reducción de emisiones contaminantes locales, además de que este sistema de transporte es mucho más seguro para los usuarios.

Como ejemplo, la recuperación de la red de trolebuses en la CDMX, por medio de tecnología más moderna y los pilotos en la red de Metrobús para la implantación de nuevas líneas con la vinculación de vehículos cero emisiones.

Hemos ido rompiendo paradigmas entre dogmas costosos al tener este aprendizaje de operación, estamos viendo que la resistencia al cambio en este tipo de tecnologías es cada vez menor.

Fernando Páez, director de Movilidad Urbana para México y Colombia de WRI

Páez explicó que con la introducción de flotas eléctricas los modelos de negocio cambian, ya que una responsabilidad que antes estaba en el oprador del transporte, se divide en términos de quien provee la flota, quien hace la operación de mantenimiento, quien suministra la energía, quien administra la infraestructura y este tipo de actores permite que los proyectos sean viables.

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