El autotransporte de carga crece a una velocidad constante y sólida dentro de la economía mexicana. Sobre la marcha, las empresas tienen la tarea de emprender proyectos de profesionalización, digitalización y crecimiento  que les permitan capitalizar las oportunidades traídas por el nearshoring y que también las hagan más resilientes ante un mundo cambiante. 

En el primer semestre de 2023, el Producto Interno Bruto (PIB) del sector incrementó a un ritmo de 4.5% anual y sumó 10 trimestres con variaciones positivas, refieren las cifras a precios constantes del Sistema de Cuentas Nacionales del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). 

Te puede interesar: Economía crecerá cerca de 3.5% este 2023: Jonathan Heath

Entre enero y junio, esta actividad aportó 3.7% del PIB nacional y el 52.7% del PIB del sector transportes, correos y almacenamiento: está clara su importancia en la economía.

En cambio, con la llegada de la pandemia, el autotransporte de carga fue revalorizado y ahora, con la potencia del nearshoring, es visto, junto con la logística, como una pieza clave para la expansión de la manufactura en el país.  

Dinamismo del autotransporte

César Salazar, investigador adscrito a la Coordinación de Análisis Macroeconométrico Prospectivo de la UNAM, evalúa que el autotransporte de carga general tiene una “buena dinámica”, con incrementos por arriba de 3.0% de su PIB en el año, superior al promedio marcado por  la economía nacional en los últimos 40 años. 

El especialista comparte que, con los niveles actuales de evolución de este sector, no se puede pensar que hay una desaceleración, y previó que continuará el crecimiento a un ritmo saludable. 

Siempre vas a necesitar mover bienes y mercancía en un país como éste, con tantos kilómetros de distancia, para conectar su punto más al sur con su punto más al norte. Con 128 millones de habitantes, parecería que el transporte de carga siempre tendrá una inercia positiva, por eso crece más que el PIB nacional”. 

César Salazar, investigador de la UNAM.

Llegó el cierre de año y los pronósticos apuntan a que la economía de México tendrá un crecimiento de 3.5 por ciento, lejos del 1.7% estimado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) en enero pasado. El comportamiento del PIB nacional sorprendió a todos, incluso al Gobierno. 

Salazar López identifica tres elementos que impulsan esta tendencia en 2023: se trata del consumo, el principal generador de carga; el crecimiento del PIB de Estados Unidos y la apreciación del peso sobre el dólar, que en el año tocó un mínimo de 16.62 pesos por dólar.

La moderación de la inflación, así como el comportamiento de la manufactura, apoyada por la industria automotriz, tienen un reflejo en las exportaciones, ya que, de enero a agosto, éstas acumularon un alza anual de 3.8% y la expectativa es que cierren este año en su máximo histórico. 

El momento para la evolución

Jorge Wong, experto en operaciones, gestión y mejora en el autotransporte de carga y logística, sostiene que “el escenario para la industria es y será positivo”, ante una economía que ha mostrado resiliencia y que crece por arriba de las expectativas. 

Refiere, en entrevista para TyT que, si bien su desempeño depende de la zona del país y de la industria a la que atiende cada empresa transportista, los resultados son alentadores, mientras que 2024 luce con nuevas oportunidades. 

El experto, que ha ocupado puestos directivos en Grupo TM, Grupo Traxión y Estafeta, resalta la fortaleza del consumo de los hogares, y añade otro elemento que suma potencial de crecimiento a la industria: el nearshoring. 

Señala que el 79% de las empresas manufactureras de Estados Unidos, actualmente instaladas en China, están buscando relocalizarse en la región del T-MEC. Es algo que ya está pasando y lleva tiempo dándose en las industrias farmacéutica, energética, automotriz y textil, principalmente, añade.

Es el momento en el que el autotransporte de carga tiene que dar un paso importante, no solo de renovación y crecimiento de flota, sino que tiene grandes retos como profesionalizarse, pues trabajar en el proceso de institucionalizarse; además requiere un talento más especializado y políticas diferentes, en especial si se expande fuera de México”.

Jorge Wong, experto en operaciones, gestión y mejora en el autotransporte de carga.

Wong Ramírez reconoce que crear el ambiente para aprovechar al máximo las oportunidades generadas por la relocalización de la manufactura es un trabajo que requiere mucha colaboración, inversión y nuevas políticas de todos los actores: Gobierno, industria y cámaras; porque, pese a que ya están tomadas las decisiones, el nearshoring no sucederá mágicamente. 

Elecciones y la guerra, los focos rojos

El Investigador adscrito a la Coordinación de Análisis Macroeconométrico Prospectivo de la UNAM, sostiene que el autotransporte de carga tendrá una inercia positiva causada por las actividades productivas y, en este momento, más que factores internos en la economía, el principal riesgo para el sector son los efectos de la guerra en los costos de los insumos.

Si la zona de conflicto es Medio Oriente, el precio del petróleo se eleva y es un riesgo importante para el transporte en general, porque el incremento de los costos para el autotransporte lo hacen no rentable”. 

César Salazar, investigador de la UNAM.

Jorge Wong añade por separado que, entre los riesgos en contra, está la incertidumbre alimentada por el año electoral en México y Estados Unidos. En lo local, generada por las políticas o leyes que no se aprueban o regulaciones que no se atienden y que están afectando al autotransporte de carga.

En Estados Unidos, además de la incertidumbre que genera el destino de su economía ante las señales de una desaceleración, están también las decisiones políticas, como  son las medidas migratorias que buscan ganar votos y que ya han afectado al comercio con México. 

Es probable que se agudicen las inspecciones migratorias en la frontera; entonces, las cámaras y los Gobiernos tendrán que ponerse ‘manos a la obra’, recurrir a la innovación y buscar alternativas para que el intercambio de mercancías siga fluyendo«.

Jorge Wong, experto en operaciones, gestión y mejora en el autotransporte de carga.

Previsión 

Consultado por TyT, Enrique González Muñoz, Presidente del Consejo de Administración de Express MG, coincide en que 2024 se visualiza retador, principalmente por la incertidumbre que generan las elecciones en México y Estados Unidos. En cambio, la demanda del autotransporte generada por el nearshoring ya es muy alta y se prevé un potente arranque de año.

Con el  fenómeno del nearshoring, el transporte en México tiene que aumentar entre 15 y 18% en los próximos 10 años. Si no crecemos en ese estándar, no vamos a aprovechar las áreas de oportunidad que brinda esta relocalización”.

Enrique González Muñoz, Presidente del Consejo de Administración de Express MG.

Quien también fue presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), añade que la inseguridad, el déficit de operadores y la infraestructura logística en el país son retos que deben atender de forma conjunta y urgente las empresas transportistas y las autoridades de todos los niveles; esto incluye realizar planteamientos ante las aspirantes a la presidencia de México. 

A unas semanas de concluir el año, se estima un crecimiento económico en torno al 3.5% este 2023, lo que significa que el autotransporte  de carga en general registrará un alza anual cercana a 4.0 por ciento. 

Y ante un panorama incierto, hasta el momento, los pronósticos refieren una desaceleración a 2.1% del PIB para 2024, de acuerdo con el FMI.

Este comportamiento significa un crecimiento de 2.5% para el PIB del autotransporte de carga. Lo cierto es que el mundo se muestra cada vez más cambiante y el futuro económico de las naciones, menos previsible.

Te invitamos a escuchar el nuevo episodio de nuestro podcast Ruta TyT: