El desarrollo de las ciudades, de los proyectos de infraestructura que en ellas se llevan a cabo, o bien la construcción de carreteras, puentes y grandes estructuras no se podría entender sin la participación de los vehículos vocacionales, modelos que responden a necesidades específicas, camiones netamente de trabajo rudo o severo diseñados para enfrentar las condiciones más difíciles en su camino.
En los diversos rubros donde se desempeñan, trabajando con equipo aliado como mezcladoras, compactadoras de basura, de volteo, entre otras, además de pendientes y terracerías, experimentan largas y duras jornadas de trabajo, por ello las armadoras han puesto a disposición de sus clientes vehículos capaces de cumplir con las exigencias de fuerza y desempeño para resistirlas. Una mezcla perfecta de potencia (motor), durabilidad, calidad y bajo costo operativo.
El segmento vocacional
Marcas como CAT, Freightliner, International, Kenworth, Mack, MAN y Volvo entre otras son las que dominan este segmento caracterizado por su rudeza y eficiencia y versatilidad ya que son empleados en las más variadas aplicaciones:
- En la construcción, estas unidades son fundamentales para el desarrollo de las obras de infraestructura.
- En la recolección de residuos. Unidades por naturaleza, fundamentales en la recolección de basura y más aún cuando se está especializando y segmentado la recolección de los residuos. Para ello las configuraciones incluyen dispositivos con compresores de mayor capacidad, frenos de mayor dimensión y todas las facilidades para accionar los equipos empleados en estas unidades.
- En el transporte logístico y de valores. Compuesto principalmente por cargas voluminosas que requieren de un semirremolque y por camiones blindados que por sus requerimientos precisan de un chasis especial.
Prácticamente en cada una de sus aplicaciones los camiones vocacionales son configurados a la medida, con lo que se logra mayor productividad en los servicios y proyectos en los que son utilizados.
