Llenar el tanque de combustible por las mañanas o buscar la estación de servicio con el precio más bajo del diesel, es solo una pequeña parte para que las flotas logren un verdadero ahorro en este renglón. José Gutiérrez, Director de Enlace Industrial para el Consejo Norteamericano para la Eficiencia de la Carga (NACFE, por sus siglas en inglés) en Latinoamérica, señala que la clave está en las buenas prácticas de la operación.
“Con buscar dónde puedes comprar el litro de diesel más barato, ese tanque te va a salir más barato; sin embargo, si tú modificas para bien tus hábitos de manejo, ese mismo diesel, puede rendir más. No necesariamente te puede costar menos pero te brinda más por kilómetro, por tonelada o como lo quieras medir”, comenta.
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Bajo la premisa de que los precios del diesel no se controlan pero la eficiencia sí, el experto señala en entrevista para TyT que hay dos aspectos clave para mejorar: las llantas y el manejo en sí.
Sobre el primer punto, comparte que los neumáticos no deben estar ni sobreinflados ni por debajo de lo nominal que recomienda el fabricante. A ello se le suma tener las llantas correctas y en las mejores condiciones: “Hemos visto en las carreteras que traen llantas mezcladas: nuevas, usadas, tractivas, direccionales, de baja resistencia al rodado, cuando lo ideal es que todas sean las que deben ser en cada área y que estén en buenas condiciones y en su inflado nominal recomendado”.
Agrega que un aspecto que en ocasiones no se toma en cuenta y que impacta a los neumáticos es la alineación del camión; y es que se han observado llantas desgastadas transversalmente: “Eso quiere decir que se está arrastrando la llanta, y dicen ‘por qué se arrastra si está bien inflada’ y es por la alineación del camión”.
“El costo eficiente de las llantas se puede disparar si no están bien infladas o bien alineadas, incluso he visto llantas que no tienen ni seis meses o cuatro meses y ya no sirven precisamente porque se vuela una ceja o se despegó el piso de una llanta nueva por un mal inflado”, precisa el entrevistado.
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Otras prácticas que los conductores pueden implementar para cuidar los neumáticos, es revisar la presión nominal con un manómetro antes de abordar el camión y, en cuanto al manejo, evitar superficies que puedan dañarlos.
“Nuestras carreteras no son las mejores, pero sí podemos tener cuidado al salir de la carretera para ir a un paradero y vemos que tienen tierra, grava, baches, puede haber incluso tornillos o fierros; y ahí, en la medida de lo posible, recomendaría estacionarse o bajarse de la carpeta asfáltica hacia zonas donde esté el pavimentado mucho más limpio, por decirlo de alguna manera”, comenta.
José Gutiérrez reconoce que no hay datos duros recopilados en México sobre cómo ayudan estas prácticas a reducir el costo del combustible, justamente generar esta información es uno de los objetivos de NACFE LATAM, pero en Estados Unidos se ha reportado que se pueden ahorrar casi ocho centavos de dólar del consumo de las llantas contra el combustible, a lo que se le suma alargar la vida de los neumáticos.
Respecto a la operación, es otra área de oportunidad para ahorrar en el consumo de combustible y mejorar la eficiencia. Evitar los acelerones, frenones y el ralentí, son algunas de las recomendaciones del también socio fundador de la consultora Highpercons.
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De acuerdo con el experto, las buenas prácticas de manejo, como no tener acelerones, mantener una velocidad constante, una velocidad crucero, puede ayudar a lograr una eficiencia del combustible en un 20 por ciento.
Y si bien reconoce que aspectos como dispositivos de aerodinámica o para contar con aire acondicionado en cabina sin recurrir al ralentí suman a los ahorros de combustible, la operación y las llantas son los que más suman.
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