En días pasados, se llevó a cabo el Encuentro de Movilidad Sostenible en la localidad de Galindo, en el municipio de San Juan del Río, Querétaro, teniendo a la ANTP como anfitrión. El objetivo fue impulsar las mejores prácticas para fortalecer el uso de nuevas tecnologías amigables con el medio ambiente.
La alternativa actual en el mercado mexicano de vehículos comerciales, se está decantando mayormente por la electromovilidad; sin embargo, hubo una conferencia muy interesante donde se mencionaron otras dos tecnologías. La primera de práctica corriente y la segunda aún en desarrollo: el gas natural comprimido y el hidrógeno.
Me parece que, como industria, es importante tener una visión de todas las tecnologías que pueden ayudar a la descarbonización y no sólo en la electrificación. Hay armadoras y fabricantes de motores que tienen proyectos avanzados en otras tecnologías —hidrógeno principalmente— que parecen factibles y que, a mediano plazo, puede ser un gran participante en la descarbonización, dependiendo de su proceso de producción.
En la descarbonización, no existe una tecnología única que vaya a “dominar” la industria, como hasta ahora había sido el diésel. La diversidad de tecnologías que han surgido después del diésel como el gas natural, los vehículos eléctricos y los que aún están por florecer como el hidrógeno, tendrán nichos según la aplicación, las rutas y conveniencia de la flota.
Leer: ¿Cuáles son algunos de los factores que se involucran en la eficiencia de combustible?
Siguen siendo muy importantes factores como la seguridad y la eficiencia en esta etapa del desarrollo de la movilidad sostenible, pues se trata no sólo de usar un vehículo que genere menos NOx, CO o CO2, sino también de tener mejoras en los procesos, incluyendo los administrativos. Asimismo, mejorar la planeación, que lleve a un ahorro de energía en toda la operación de la flota. Y, aun cuando en los vehículos eléctricos el mantenimiento es mínimo, es importante planearlo y hacerlo eficiente en todos los aspectos.
De manera que durante esta transición desordenada (encontré un mejor término para traducir el messy middle, acuñado por NACFE) de tecnologías, hay mucho que podemos hacer para incrementar la eficiencia del transporte y colaborar con una menor emisión de gases contaminantes, rumbo a la descarbonización.
Super Truck
Como ustedes saben, el Gobierno de Estados Unidos, a través de su Departamento de Energía (DOE, por sus siglas en inglés), desarrolló en 2009 el proyecto Super Truck, para demostrar que las nuevas tecnologías pueden operar a un menor costo, con mayor eficiencia y con una gran mejora en la sustentabilidad ambiental. En NACFE ya tenemos un reporte ejecutivo del Super Truck 2.
El próximo mes compartiré con ustedes un extracto. La importancia de este proyecto es que el potencial de estas tecnologías constituye una influencia para diseños futuros para la producción de tractocamiones.
Acerca de José Gutiérrez: es el director de Enlace Industrial para NACFE LATAM y socio fundador de la firma de consultoría Highpercons, la cual se enfoca en el diseño de estrategias, eficiencia de flotas y manejo óptimo de talleres.
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