FedEx adquirirá 150 camiones eléctricos EV Blue Arc, que se integrarán en la flota de recolección y entrega de la empresa en Estados Unidos, informó The Shyft Group, empresa responsable de la fabricación, ensamblaje y mejora de esos vehículos.
En un comunicado, The Shyft Group, explicó que el de FedEx es un pedido inicial. Y agregó: Refleja el compromiso compartido de ambas organizaciones de reducir las emisiones de carbono y la contaminación del aire mediante la adopción de vehículos eléctricos de calidad comercial».
«Mientras trabajamos hacia la electrificación gradual de toda nuestra flota global de recogida y entrega para 2040, FedEx está ansioso por incorporar modelos de vehículos eléctricos nuevos y eficientes que satisfagan las demandas de nuestra diversa red», dijo Pat Donlon, Vicepresidente de Vehículos Globales de FedEx Express. «Esperamos incorporar el Blue Arc a nuestra creciente cartera de vehículos eléctricos en servicio en todo el mundo».
Por su parte, John Dunn, Presidente y Director Ejecutivo de Shyft Group, destacó la colaboración con FedEx, que calificó como fundamental «para perfeccionar nuestra estrategia para satisfacer las necesidades de flotas de vehículos eléctricos de nivel comercial».
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Camiones con rutas de 8 a 10 horas de operación
The Shyft Group detalló que FedEx probó el vehículo en condiciones reales, usándolo en rutas de entrega de última milla en Memphis.
Durante el piloto, el camión Blue Arc operó rutas extendidas de 8 a 10 horas en condiciones desafiantes. Las pruebas incluyeron temperaturas que oscilaban entre 95 y 105 grados Fahrenheit (35 y 40 grados centígrados), lo que marcó un hito importante en la preparación del vehículo para un uso comercial generalizado.
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En las pruebas, el camión Blue Arc demostró ser confiable en rutas largas y eficiente en el uso de energía. Mostró ser capaz de regenerar entre 20 y 30 kW de potencia a través de su sistema de frenado regenerativo. Estas características subrayan la preparación del vehículo para aplicaciones comerciales del mundo real. Además, los operadores resaltaron la facilidad de maniobra y comodidad general en comparación con los vehículos de gasolina convencionales.
«Nuestro proceso Work-Driven Design es fundamental para nuestra innovación, ya que garantiza que incorporamos comentarios directos de quienes usan nuestros vehículos a diario. Este enfoque no sólo aborda la seguridad y la eficiencia, sino que también mejora significativamente la productividad general», agregó Dunn.
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