Enfrentar el miedo, tomar decisiones y creer en sí mismas son las claves que a Gisela Quintero, Directora de Servicios y Experiencia al Cliente de Scania México, le han permitido crecer profesionalmente desde sus inicios hace 15 años en la industria automotriz y aeronáutica.
Después de seis años en la armadora sueca, a la que se incorporó como Gerente de Logística, su ascenso fue solo cuestión de tiempo y, hoy, encabeza una de las áreas estratégicas de la compañía en México, demostrando que el esfuerzo y la dedicación son recompensados.
Con una amplia trayectoria, la Licenciada en Administración y Maestra en Negocios Internacionales reconoce que no ha sido sencillo, ya que para alcanzar sus objetivos ha tenido que impedir que el miedo y las dudas la paralicen, y encontrar la manera de seguir creciendo a pesar de las circunstancias que se presenten en el camino.
“Creo que en tu carrera profesional y en la vida te encuentras en situaciones en donde tienes que alcanzar una meta, pero quizá no sabes por dónde empezar o dudas de que puedas hacerlo. Lo fundamental es creer en ti misma y no tener miedo a preguntar o reconocer que necesitas ayuda”.
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Si bien Gisela confiesa que no tiene un modelo a seguir, sí cree que las personas a lo largo de su camino la inspiran de alguna manera, y una de ellas fue su madre, quien le dejó en claro que “en la vida todo es tomar decisiones”, y que eso conlleva ser consciente de que ello supone obtener y, al mismo tiempo, renunciar a algo.
Considera que hay avances en materia de equidad, puesto que ya no es la misma industria que cuando inició su carrera profesional, aquélla en la que era la única mujer en una sala de juntas llena de hombres o en la que “las cosas importantes” se decidían sin perspectiva de género; sin embargo, el sector aún no se encuentra en donde debería estar en esta materia.
Por ello, destaca los esfuerzos de la industria y, en particular, los de Scania para poner este tema sobre la mesa, para visualizar a las mujeres en la resolución de las problemáticas que afectan al sector y demostrar en la realidad que se trata de sumar, no de restar.
“Afortunadamente son más y más las empresas que tienen programas de inclusión y de diversidad; ya está en la agenda y son conscientes de que hay una brecha y se reconoce la importancia de incluir a diversos grupos de personas en sus equipos. Yo creo que vamos en el camino correcto”, menciona Gisela.
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Y esto, añade, se muestra en la realidad al ver a más mujeres participar en este sector, ya sea en la operación o en la toma de decisiones, al observar a equipos que se comportan de manera distinta.
Sin embargo, destaca que hace falta impulsar aún más el cambio social hacia la igualdad, y para ello se empieza en lo personal, porque al final del día, las organizaciones están conformadas por personas y se tienen que desarraigar los viejos paradigmas, los prejuicios y los estereotipos que fueron impuestos para poder cambiarlos y avanzar.
“Pero también, todavía tenemos que irnos sumando de manera individual, quitarnos esos pensamientos preconcebidos. Yo creo que eso va a dar un mayor impulso a este camino que estamos recorriendo”.
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