El costo variable más importante para las flotas del autotransporte es el combustible. A diferencia de un vehículo a gasolina -que tiene bujías-, la combustión en un tractocamión a diésel se da con la explosión interna debido a la compresión del fluido. Y ahí radica la importancia de un aditivo.

Usarlo o no puede hacer una diferencia sustancial en el costo total de propiedad, ya que en el consumo de diesel es donde se encuentran las mayores áreas de oportunidad para generar ahorros en una flota, y el uso del aditivo puede ayudar de manera considerable.

Es por eso que la calidad del diesel es fundamental para que el motor sea más eficiente y ofrezca todo su potencial y aproveche toda su fuerza. Y para lograrlo, además, es recomendable utilizar un aditivo.

Al agregarlo, la combustión en un tractocamión tendrá distintos beneficios, además de que el consumo de combustible será más eficiente y esto se traducirá en ahorros muy importantes para las flotas, ya que el aditivo ayuda a limpiar el sistema de combustible, incluyendo los inyectores. 

Los combustibles con mucha agua pueden dejar un rastro de óxido y corrosión en el sistema, que al final, terminarán dentro del inyector y obstruirán la atomización del combustible o incluso dañarán los componentes.

Un aditivo para combustible limpia el sistema y evita las formaciones que ocasionan óxido y corrosión y permite el libre paso del combustible.

De esta manera, el aditivo para diésel ayudará a convertir el combustible en un elemento químico que reacciona y explota de una manera más uniforme. 

También evitará explosiones previas y la presencia de partículas producidas por la oxigenación del diésel que podrían provocar el mal funcionamiento del pistón y dejar partículas que afecten el ciclo de la combustión.

Otra ventaja asociada con agregar un aditivo al sistema de combustible diésel es que durante el proceso de enviar combustible desde el depósito hasta el múltiple de admisión, asiste a la lubricación de la bomba de combustible, evitando que se desgaste de manera prematura y tenga que ser reemplazada o reparada, o peor aún, que resulte en una avería a mitad del camino.

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Especialistas de Bardahl recomiendan agregar un aditivo para combustible, en alrededor de 350 mililitros por cada 200 litros de diésel.