Desde hace ya varios años, los avances tecnológicos han beneficiado de manera importante al autotransporte incrementando su eficiencia, la realidad aumentada es uno de estos recursos tecnológicos que han permitido grandes avances en el sector.
Entendamos a la realidad aumentada como la inclusión o integración, en tiempo real de elementos virtuales sobre el universo físico existente, es decir, un incremento en la información que normalmente observaría un ser humano y que permite tomar decisiones o conocer más a fondo un tema determinado.
De acuerdo con un estudio realizado por la Unidad de Sistemas de Información Geoespacial del Instituto Mexicano del Transporte (IMT), este tipo de tecnología es aplicada actualmente en la logística, la seguridad e infraestructura.
En la logística, la realidad aumentada se convierte en una herramienta para reducir los tiempos de ejecución de los procesos y al mismo tiempo incrementar la confiabilidad, mejorando las operaciones de forma sustancial.
Esta herramientas además se usa para el entrenamiento de los empleados que ejecutan las operaciones, reduciendo la curva de aprendizaje sin interferir en la ejecución normal de los procesos en cuestión.
En la misma área se puede aplicar para la verificación de la integridad de las mercancías, o bien para conocer la existencia de éstas, la ubicación fechas de caducidad, datos sobre manejos o cuidado especiales.
En tanto, en la entrega de los productos, es factible el uso del reconocimiento facial para verificar la identidad de quien recibe el producto sin necesidad de una identificación física.
Respecto al uso de la realidad aumentada en el autotransporte, suele utilizarse como apoyo en la conducción, ya que con sus aplicaciones es posible conocer información acerca de la ruta, velocidad, ubicación de incidentes e identificación de tramos.
Por ejemplo, podría ocuparse para que un tractocamión con exceso de dimensiones pueda transitar y superar los obstáculos físicos.
En situaciones de emergencia se podría utilizar para proporcionar información sobre acciones que se deben tomar para disminuir o mitigar las afectaciones.
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El estudio del IMT explica que a través de este recursos es posible también visualizar las partes de un prototipo de motor antes de que sea construído, observar el proceso de montaje, identificar las piezas que se necesitan, etc.
Mientras que para cuestiones de obras de infraestructura dedicadas al transporte, el IMT señala que con la realidad aumentada es posible verificar las orientaciones, generar una idea acerca del tamaño, visualizar datos técnicos, estructurales y de mantenimiento de una carretera, por ejemplo.
Aunado a ello, en las carreteras se puede aplicar para verificar el tipo de vehículos que circulan y saber si cuentan con las características necesarias para hacerlo de acuerdo a la normatividad aplicable por tipo de carretera.
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