Después de más de dos meses de confinamiento debido al rebrote de COVID-19 en China, a partir de este miércoles 1 de junio se reanudarán por completo las actividades industriales y comerciales en Shanghái, así lo informó el Gobierno chino.
Los centros comerciales, supermercados, tiendas de conveniencia, farmacias y otros puntos de venta, así como zonas culturales, turísticas e industriales reanudarán sus operaciones con un aforo máximo del 75% de su capacidad, de acuerdo con datos de la agencia estatal Xinhua.
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El transporte público como autobuses y la red ferroviaria reanudarán sus operaciones con normalidad, siempre y cuando los usuarios y quienes brinden el servicio lleven a cabo las medidas sanitarias.
Los vehículos privados y corporativos pueden circular con normalidad, excepto en las áreas designadas como de medio y alto riesgo de COVID-19, y aquellas bajo administración cerrada o control restrictivo.
Quienes hayan estado en lugares de mayor afluencia y tomen el transporte público deberán tener un informe de resultado negativo de prueba de ácido nucleico dentro de las 72 horas, además de cumplir con las medidas sanitarias como el uso de cubrebocas.
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A través de conferencia de prensa, Zong Ming, vicealcaldesa de Shanghai, solicitó a la población no bajar la guardia y adherirse a las medidas estándar de prevención para evitar otro rebrote de alguna variante de COVID-19.
En tanto, China reducirá a la mitad el impuesto de compra de los automóviles de pasajeros con precios por debajo de los 300,000 yuanes (884,439 pesos), para aquellos vehículos que se compren entre el 1 de junio y el 31 de diciembre de este año, como una forma de mitigar las afectaciones en el sector automotriz, según anunció el Ministerio de Hacienda y la Administración Estatal de Impuestos.
Puertos de Shanghái ‘ven una luz’ para aumentar el comercio internacional
Los puertos de Shanghái se vieron gravemente afectados por el freno de actividades comerciales y se enfrentaron a cuellos de botella en los patios de carga, a causa de los estrictos controles que retrasaban la entrada y salida de la mercancía.
Con el anuncio de la reactivación industrial y comercial, los puertos de una de las ciudades más importantes de China en estos sectores, ha comenzado a notificar a las diferentes empresas y a recibir nueva carga proveniente del mercado local y extranjero.
En este sentido, Maersk realizó su primer envío internacional de relevo costero en Shanghái, con 27 contenedores provenientes de Vancouver, Canadá.
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El transbordo en Shanghái nos permite mejorar los servicios a través de redes optimizadas, que también podrían abordar algunos de los factores detrás de los cuellos de botella en las cadenas de suministro chinas.
Soren Skou, CEO, AP Moller – Maersk.
De acuerdo con Maersk, este transbordo permitirá acortar los tiempos de traslado de la carga, reducirá las emisiones y liberará la capacidad adicional para sus clientes.
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