La Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) advirtió que la imposición de aranceles por parte de Estados Unidos tendrá un efecto ‘bola de nieve’ en la industria y economía en general. 

Luego de que este 4 de marzo, Estados Unidos inició el cobro de aranceles de 25% a las importaciones de productos mexicanos y la presidenta Claudia Sheinbaum pidió priorizar el diálogo; además, decidió informar las represalias hasta el domingo, la ANPACT avaló a la mandataria. 

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Desde ANPACT confiamos en que las acciones encabezadas por la presidenta Claudia Sheinbaum; el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, y el canciller Juan Ramón de la Fuente permitan retomar un diálogo constructivo de manera inmediata, para encontrar soluciones conjuntas para mantener la estabilidad del sector”, expuso Rogelio Arzate, presidente ejecutivo de la Asociación. 

El representante de la industria de vehículos pesados establecida en México reiteró su llamado para que el diálogo entre México y Estados Unidos se intensifique y sea constructivo, con el objetivo de preservar la integración de las cadenas de valor existentes entre ambos países. 

Recordó que la industria automotriz de vehículos pesados está totalmente integrada y es complementaria, pues en el proceso de fabricación de las unidades pesadas, sus componentes cruzan múltiples veces la frontera; por ello, la imposición de aranceles va en detrimento del sector y la economía en general: 

El impacto arancelario sería una bola de nieve y generaría impactos económicos adicionales y procesos administrativos de comercio exterior que afectarán la eficiencia operativa”. 

Aranceles, en detrimento de transportistas 

El Presidente Ejecutivo de la ANPACT recordó que la región de América del Norte ha gozado de estabilidad, competitividad e inversión debido a la cooperación que había existido hasta el momento. Por ello, la existencia de aranceles va en detrimento del crecimiento económico, el empleo y el desarrollo regional:  

El impacto no solo es para el cliente final, sino también para la cadena logística, es decir los transportistas que mueven la carga y para las industrias que requieren los vehículos pesados para trasladar suministros, mercancías, equipos y personal en ambas naciones”. 

Si continúa la imposición de tarifas arancelarias se afectará a los fabricantes, sector productivo y consumidores de ambos países, por lo que se reitera el llamado para que el diálogo se intensifique y sea constructivo, sin tomar decisiones precipitadas ni unilaterales, tal como ha propuesto la presidenta Claudia Sheinbaum”. 

Industria externa su preocupación 

En conjunto con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), la Industria Nacional de Autopartes (INA) y la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), la iniciativa privada externó su “profunda preocupación ante la entrada en vigor de los aranceles”. 

En un comunicado conjunto, el sector sostuvo que, en coordinación con sus asociaciones hermanas en Estados Unidos y Canadá, continuará trabajando para concientizar a los tomadores de decisión sobre los riesgos de estas medidas y la necesidad de preservar el espíritu de colaboración del T-MEC.

Recordaron que, la economía de Estados Unidos podría reducirse en 0.5% para 2027 derivado de los aranceles. Además, la inflación podría aumentar hasta 4 puntos porcentuales en 2025, de acuerdo con estimaciones del Instituto Peterson de Economía Internacional. 

La industria automotriz, de la que forma parte ANPACT, respaldó los esfuerzos y gestiones realizadas por la presidenta Claudia de Sheinbaum y el equipo de la Secretaría de Economía, encabezado por Marcelo Ebrard. 

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