La inflación general de México creció 7.80% anual en noviembre pasado, a su menor ritmo en seis meses, refieren datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). 

La inflación general sorprendió al crecer por debajo del 7.94% esperado por el consenso y al marcar su segunda desaceleración consecutiva. 

El componente no subyacente creció 5.73% anual en el mes pasado, desde un alza de 8.36% vista en octubre. 

De esta forma, reportó su menor ritmo de crecimiento desde febrero de 2021, cuando su variación fue de 3.34% anual. 

Al interior de la inflación no subyacente, los precios de los productos agropecuarios avanzaron 8.69% anual, desde un 14.25% marcado en octubre pasado. 

Los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno perdieron fuerza por tercera ocasión consecutiva, con un alza de 3.23% anual en noviembre.

Sin embargo, la inflación subyacente, referente del comportamiento en el corto y mediano plazo del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), mantuvo su tendencia alcista. 

Este indicador avanzó 8.51% en noviembre, desde un 8.42% marcado en el mes previo. De esta forma aceleró su ritmo por 24 meses consecutivos. 

Los precios de las mercancías y los servicios avanzaron con más fuerza, 11.28% y 5.35% anual, respectivamente. 

Respecto al comportamiento de la inflación, Grupo Financiero Banorte expuso que las persistentes presiones en alimentos procesados y en la comida fuera de casa, en los servicios, se mantienen como los principales temas de preocupación. 

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El efecto de El Buen Fin en la inflación mensual 

La inflación a tasa mensual fue de 0.58%, a excepción de lo visto en noviembre de 2020, se trató de su menor nivel desde 2015. 

Su comportamiento estuvo beneficiado por los descuentos realizados durante El Buen Fin, celebrado del 18 al 21 de noviembre. 

La inflación subyacente fue de 0.45%, inferior al 0.63% del mes previo. 

Las mercancías se desaceleraron a 0.43% mensual y los servicios crecieron 0.48%, desde un 0.33% visto en octubre.  

La no subyacente avanzó 0.94%, en su interior los precios de los productos agropecuarios descendieron 0.42% mensual. 

En tanto, los precios de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno incrementaron 2.11% anual. 

Los precios de los productos y servicios con mayor incidencia a la baja para la inflación general fueron la cebolla (-23.6), el gas doméstico LP (-2.3) y la papa (-8.38%), refieren datos del Inegi. 

En contraste, las presiones al alza provinieron desde la energía eléctrica, con un incremento de 20.29%; el chile serrano, con 65.8%; y los precios en las loncherías, fondas, torterías, con un alza de 0.83% mensual. 

La expectativa 

Banorte prevé que la inflación general ya tocó su máximo nivel, sin embargo, prevé un repunte a 8.4% para el cierre de año. 

Las presiones se deben a una mayor demanda esperada en el consumo por las vacaciones de fin de año y a potentes ajustes al alza en los precios de año nuevo, tras el anuncio del incremento de 20% al salario mínimo.