A pesar de que hablar de Inteligencia Artificial (IA) no es algo nuevo, hoy se trata de una de las fuerzas transformadoras más importantes en la historia de la humanidad, ya que bien puede tratarse de automatizar procesos industriales o de la personalización de las experiencias de vida. 

Y si bien la IA está remodelando distintos aspectos de la vida humana y plantea oportunidades que podrían cambiar el rumbo de una persona o de una empresa, también implica una serie de desafíos significativos que, sin duda, merecen una profunda reflexión. 

Así que para entender de qué va esta tendencia, es importante comprender el concepto: se trata de la capacidad de máquinas, computadoras o dispositivos para realizar tareas que, en general, requieren inteligencia humana. Y esto puede ser aprendizaje automatizado, procesamiento de lenguaje natural, reconocimiento de patrones y, por supuesto, tomar decisiones.

Las bases teóricas de la Inteligencia Artificial que conocemos hoy datan de la década de 1950, pero sin duda, su auge y crecimiento exponencial ya son de este siglo, principalmente en los últimos 20 años, gracias a los avances tecnológicos en el poder computacional y, sobre todo, a la (casi) infinita disponibilidad de datos y desarrollo de algoritmos cada vez más sofisticados.

Principales aplicaciones y oportunidades 

Tan solo hace un par de años, cuando empezó a popularizarse el famoso concepto del ChatGPT, mucho se especuló sobre sus usos y hasta sobre las amenazas para industrias, oficios y puestos de trabajo; sin embargo, el tiempo y la adopción han dejado ver que se trata de tecnologías que pueden ser utilizadas para la evolución, es decir, para que las personas avances y cambien. Actualizarse o morir.

En el ámbito de la medicina, por ejemplo, la IA se utiliza en el análisis de imágenes especializadas para detectar enfermedades con mayor precisión y rapidez. En el sector financiero, los algoritmos de IA son empleados para predecir movimientos del mercado y gestionar riesgos, mientras que en el campo de la educación, las herramientas basadas en IA personalizan el aprendizaje y se adaptan a las necesidades individuales de cada estudiante.

En este punto, Harley Aranda, CEO de Insoftar —empresa de arquitectura de software inteligente—, señaló que uno de los beneficios más destacables de la IA es su capacidad para mejorar la eficiencia y reducir costos. 

La automatización de tareas repetitivas, en este sentido, permite a las empresas concentrarse en actividades de mayor valor añadido, además de que la IA facilita la toma de decisiones informadas al proporcionar análisis detallados y previsiones basadas en grandes volúmenes de datos.

Desafíos y consideraciones éticas

A pesar de los numerosos beneficios que puede aportar esta tecnología, la Inteligencia Artificial también presenta desafíos significativos, y uno de los principales podría ser el impacto en el empleo, ya que la automatización de tareas podría llevar a la pérdida de trabajos en ciertos sectores.

Pero no es todo, pues la IA plantea importantes cuestiones éticas. Los algoritmos utilizados en la toma de decisiones pueden reflejar sesgos presentes en los datos con los que fueron entrenados, lo que puede llevar a resultados con cierta tendencia, así como la privacidad es otro aspecto crítico. 

Los sistemas de IA a menudo requieren grandes cantidades de datos personales, lo que suscita preocupaciones sobre cómo se recopilan, almacenan y utilizan estos datos. La protección de la privacidad y la seguridad de la información es fundamental para mantener la confianza pública en estas tecnologías.

Pero de acuerdo con Aranda, este fenómeno en realidad tendría que ser una evolución, pues la principal área en la que podría ser utilizada la Inteligencia Artificial está en tareas administrativas, de escritorio, y cuyo papel sea perfectamente sustituible por un algoritmo o dispositivo inteligente.

En temas como el ChatGPT, por ejemplo, sin duda es posible pensar en funciones muy específicas que tienden a desaparecer, pero al mismo tiempo a evolucionar, pues en lugar de tener a 10 personas haciendo un trabajo administrativo, se podría tener a dos que administren la Inteligencia Artificial.

Justo el dilema moral tiene que ver con qué hacer con esas ocho personas. De acuerdo con el especialista, más bien las empresas están invirtiendo en capacitación y evolución para este personal, ya que la eficiencia no significa recortar una plantilla, sino generar más con los recursos existentes.

¿Y en el transporte?

En el caso de Insoftar, la compañía puso en marcha un programa piloto en una empresa de transporte en Colombia, con una solución desarrollada por ellos y, justamente, con este propósito.

Aranda detalla que se trata de una tecnología que permite coordinar, gestionar y flexibilizar las rutas del transporte, así como hacer mucho más eficientes las cargas y, en general, toda la operación de la empresa. 

“Pensemos en los GPS, por ejemplo, que nos indican la geolocalización de un vehículo, pero si a esto le agregas Inteligencia Artificial, puedes obtener más información y más posibilidades. 

“Un ejemplo preciso es que, si hay que movilizar una carga de una ciudad a otra y en ese momento surge un nuevo pedimento, la tecnología no solo detecta esta oportunidad, sino que también es capaz de analizar y hasta decidir si ese vehículo puede pasar por esa carga, a fin de hacer más eficiente ese viaje y evitar algún otro que hubiera podido recogerla”, señaló. 

De a poco, manifiesta Aranda, se obtienen más datos para alimentar la tecnología, de tal manera que mientras más información se proporciona, mejores serán los resultados 

A diferencia de otras tecnologías, detalla el especialista, antes las empresas solían adaptarse a éstas, mientras que ahora, con la Inteligencia Artificial es al revés, pues es la IA la que se adapta a los procesos de una compañía, de modo que actualmente hay que determinar para qué será utilizada y obtener el máximo provecho de ella. 

En este sentido, actividades tradicionales como puestos administrativos, de contabilidad, recursos humanos o auxiliares de oficina, sin duda tenderán a evolucionar, pues la gran mayoría de sus tareas son perfectamente sustituibles por la IA. 

“No se trata de que todo lo haga la Inteligencia Artificial, pero es muy probable que si en un departamento de contabilidad tienes 10 personas, tal vez te quedes con dos que ejecuten la IA y el trabajo se haga de la misma manera o, incluso, hasta en menos tiempo, pero siempre bajo el mando del personal mejor calificado.

“Esto querrá decir que las ocho personas que ya no estarán haciendo esas actividades tendrán que evolucionar y aprender a utilizar la tecnología para no quedar rebasadas, y aquí es donde el tema de capacitación y reestructuración toma relevancia, ya que no se trata de eliminar fuentes de empleo, sino de cambiar, de transformar”. 

Por último, el especialista agrega que Insoftar está desarrollando una nueva solución para la automatización de procesos de logística y transporte, principalmente con el fin de dar seguimiento a temas de recepción, almacenamiento y seguimiento de productos y mercancías. 

Pionera en México

Otro tema fundamental para el autotransporte, relacionado con la Inteligencia Artificial, es la segmentación, ya que hoy existen tecnologías que permiten realizar una investigación de mercado de una manera mucho más rápida y eficiente, a diferencia de los procesos de encuestas que solían tomar meses.

Itzul Girón es fundadora y CEO de Celestial Dynamics Technology Lab, empresa mexicana pionera en Inteligencia Artificial que creó MATRIA AI, una solución conformada por más de 85 millones de gemelos digitales que modelan personalidades y comportamientos con gran precisión.

En entrevista para TyT, la especialista explicó que esta tecnología tiene un enfoque específico para pequeñas y medianas empresas que buscan información relacionada con las zonas en las que existe mayor potencial de negocio, como la población, hábitos de consumo o movilidad, entre otros. 

“Un objetivo primordial es generar estrategias de comunicación basadas en una plataforma muy robusta que permita conocer todo lo necesario para tomar una decisión de negocio”.

En este sentido, Girón agrega que, si bien ya existen grandes avances a nivel global en la implementación de la Inteligencia Artificial, en México esto apenas comienza, razón por la que Celestial Dynamics Technology Lab se ha convertido en una empresa consultora que acompaña este procedimiento. 

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“Primero conocemos y observamos los procesos de una empresa para saber cuáles son las principales áreas de oportunidad para implementar la IA, y después creamos una estrategia personalizada para ir sumando esta tecnología paso a paso, de tal manera que los empresarios vean el avance y la evolución en sus procesos”. 

Y mientras esto sucede, la especialista considera que lo más oportuno en este momento es seguir desarrollando el talento humano, pues, como se dijo antes, la Inteligencia Artificial es una gran oportunidad para que los trabajos de hoy evolucionen junto con los procesos de cualquier organización.

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